Bodegueros y viticultores sanduceros piden al Inavi que deje sin efecto retenciones vínicas

Resurgió en las últimas semanas la Unión de Bodegueros y Viticultores de Paysandú, la cual ya ha mantenido contactos al máximo nivel de la institución vitivinícola del gobierno, procurando destrabar las retenciones vínicas, factor que determina que el bodeguero no le compre uva a los viticultores y generando diversos problemas en el sector.
Nicolás Wasiluk manifestó a EL TELEGRAFO que la Unión de Bodegueros y Viticultores “desde hace muchos años se formó en Paysandú”. Con el correr de los años y la falta de motivación en el sector, “quedaron por el camino muchos bodegueros y viticultores, por lo que surgió la intención de renovar papeles en el aspecto legal, resurgiendo hace poco tiempo”.
Eso provocó modificar la directiva, procurando que el sector siga para adelante, “atendiendo a las adversidades que se presentan a diario, como los costos, la producción y la venta de vinos”, dijo el empresario sanducero.
Por tal motivo, este miércoles se reunieron en la sala 1º de Julio de diario EL TELEGRAFO, “para ir previendo lo que se vendrá en la próxima cosecha. Actualmente lo que tranca al bodeguero para la compra de uva a los viticultores, son las retenciones vínicas”, señaló, agregando que “es una prestación que se debe tener por una reserva para Uruguay”.
No se entiende con la cantidad de vino que cuenta Uruguay, de que exista todavía esta retención. “Planteamos que se favorezca al viticultor y al bodeguero. Porque si al viticultor no le compramos la uva, el viticultor no tiene donde colocarla”, dijo. Y recordó que en 2014 “hubo una buena resolución del Instituto Nacional de Vitivinicultura (Inavi) frente a los viticultores y bodegueros, y pretendemos que se vuelva a lo acontecido ese año”.
Wasiluk manifestó que oportunamente se comunicaron con el enólogo José Lez, presidente de Inavi, “solicitándonos que hiciéramos una carta formal para que lo traten en la directiva, por lo que estamos a la espera de saber qué determinación adoptan en el instituto”.
Otro de los temas abordados en el encuentro fue la situación del predio que Unión de Bodegueros y Viticultores de Paysandú posee sobre ruta 3. “Se analizará qué hacer en el futuro, para que sea utilizable en diferentes actividades”.

Sector reducido

“Todos los años se va reduciendo el sector”, reconoció. “Sucede que nadie planta nuevas vides, y lo que estamos haciendo es reconvertir. Eso significa que en aquellas plantaciones antiguas plantamos en el mismo lugar, pero no se compran chacras y campos”.
Apuntó que una situación similar atraviesan los viticultores. “Tienen que sacar muy bien los números para ver si realmente hacen plantaciones nuevas o abandonar el campo, y eso es lo que lamentamos realmente hoy en el sector”.
Dijo que esa reducción está a la vista. “Hoy en día quedan muy pocas bodegas en Paysandú y los viticultores son cada vez menos”.

Comercialización

La devaluación de los países vecinos y las importaciones que se hacen desde nuestro país con bajos impuestos “perjudican a nivel nacional”, expresó Wasiluk.
Manifestó respecto a la cercanía con Colón, Entre Ríos, que “todos sabemos que la gente se trae su botella de vino, pero destacamos permanentemente que en Paysandú y el país, se vende muy buena calidad de vino, y es lo que nos hace competitivos frente a otros países”.
En lo productivo, indicó que “las precipitaciones que llegaron recientemente hará que la planta agarre más energía, y no nos podemos quejar porque se prevé una cosecha muy linda, aunque hasta que no estén dentro de la bodega no podemos dar el veredicto final”. “El proceso actual es de cura, de leve desojado de la planta, entre otros aspectos”, acotó.