La semana previa a la gran final del sábado ante Old Christians se vive con intensidad en Trébol, que se prepara para afrontar ese momento histórico con la ilusión de quedarse con su primer título en Primera y destronar a los azules, los ganadores de las últimas tres ediciones del Uruguayo de Clubes de rugby. Pasadas las duras semifinales ante Carrasco Polo, la cabeza se enfoca ahora a esta finalísima que genera mucha expectativa en el club sanducero.
Lo fundamental estos días será “recuperar a los jugadores para que estén en óptimas condiciones”, señaló el entrenador Mateo Durán. “Vamos a llegar muy bien pese a tener un día menos de descanso (Old Christians jugó el sábado la semi ante Montevideo Cricket y Trébol el domingo). Sin ningún problema”, añadió el DT quien reconoció que el emotivo encuentro ante Polo, que definió el pase a la final, resultó “bravo verlo de afuera” por todo lo que se jugaban y por cómo se dio.
Durán confirmó que tiene a todo el plantel a disposición, a excepción de Juan Pedro Rombys y Agustín Della Corte –afectados a la selección que se va de gira por Europa– y de Guillermo Lijtenstein, quien no se ha recuperado de un desgarro.
El entrenador no se fía de las bajas que tendrá Old Christians, ocho en total, por los convocados a Los Teros y por los que se marcharon a jugar a Estados Unidos. “Old Christians tiene para elegir entre 150 jugadores, le sobra calidad. Salió campeón tres años consecutivos y es el mejor club en Uruguay. Ahora nos toca a nosotros el desafío” de enfrentarlo en la lucha por el título, subrayó.
La importancia del Scrum
Respecto a los duelos con Carrasco Polo, Durán dijo que se dio como se preveía: cerrados, inciertos y definidos por detalles. “No había mucho misterio, iba a ser así, ellos tienen tremendo equipo, con seleccionados y jugadores mundialistas. No por nada es el equipo más lauredado en el país. Nosotros tenemos lo nuestro pero sabíamos que los partidos serían súper parejos, con resultados cerrados”.
El DT de Trébol afirmó que la diferencia para superar la llave estuvo en “una sumatoria de detalles entre el partido de ida y de vuelta”, como el scrum. “Los forwards nuestros entendieron que esa formación iba a ser clave, logramos revertir lo del primer partido cuando ellos fueron superiores en ese aspecto. Eso explicó el resultado”.
También la jugada del último try, el que valió el pasaje a la final, reveló un aspecto clave para superar a Carrasco Polo, como la paciencia. Un momento eterno sobre una esquina, en la que solo valía apoyar en ese instante para que no se escapara la clasificación. “Es difícil de explicar. Lo vinculo mucho a la confianza, cuando estás seguro de ti y de tus compañeros, esa tranquilidad interna genera paciencia, muy difícil de manejarla y entrenarla. El año pasado fallamos en eso y no pudimos aprovechar. Y nos lamentamos justamente de eso. Este año la diferencia está en que nos encontramos muy bien de confianza”.
