La Corporación Aceroceánico Uruguay presentará una propuesta al Ministerio de Transporte y Obras Públicas (MTOP) para desguazar todos los barcos en situación de abandono que se encuentran en el arroyo Las vacas. “No se puede esperar a una licitación”, dijo a EL TELEGRAFO el principal de la empresa, Alvaro Nicola.
Argumentó que “esto tiene que tener una intención a nivel nacional de que se solucione de una vez con gente calificada en el rubro”.
En este sentido, anunció que solicitará una entrevista con el ministro de Transporte y Obras Públicas, Víctor Rossi, proponiendo que se desguace todas las embarcaciones en situación de abandono que se encuentran en distintos puntos del arroyo, y ofrece que el Estado pague solamente los gastos de operaciones y los jornales de los trabajadores y sin lucro para la empresa, solicitando además ayuda al grupo de buceo de la Armada Nacional para amarrar bien los barcos que están en riesgo.
LIMPIAR EL ARROYO
Y DAR TRABAJO
Dijo que “la idea es no sólo dejar limpio de chatarra el arroyo sino poder brindar mucha mano de obra local, ya que para poder sacar todo en el menor tiempo posible se deberá trabajar en varias embarcaciones a la vez. Tenemos capacidad operativa tanto en maquinaria como en personal calificado que se trasladaría desde Montevideo, pero se tomarían unas 25 personas más entre cortadores y peones”.
Para desguazar barcos deben cumplirse normas establecidas por Prefectura, y también tener experiencia. Detalló que “las exigencias incluyen ser un taller naval registrado en Marina Mercante y a nivel nacional, presentar planes de desguace en Cotec, pedir las inspecciones de casco y máquina para el comienzo del desguace y las autorizaciones de libre de gases que tienen que ir todas las semanas para autorizar etapa por etapa los trabajos en caliente. En caso de trasladar algún barco para una rampa, muelle o astillero se deberá presentar un plan de remolque y cumplir con el mismo. Se deberán nacionalizar todos los barcos para poder ingresar toda la chatarra al país por lo que se debe tener la documentación de los barcos o algún papel que se pueda presentar ante Aduana. Todo esto lo tendrá que agilizar el MTOP”, explicó, y “por eso en nuestra propuesta solicitanos el apoyo de MTOP, Hidrografía, Prefectura y privados, ya que los campos linderos a los atracaderos o zonas donde se podrá trabajar son de privados”.
ANTES QUE SE HUNDAN
Nicola especificó que “ponemos mucho énfasis en que todos estos movimientos tienen que ser lo más rápidos posibles ya que los costos operativos pueden variar de un día para el otro”, explicando que “no es lo mismo trasladar un barco que hoy flota a alguna zona donde se pueda desguazar a que se hunda y se tenga que reflotar, ya que eso implica gastos extremadamente elevados, y esto ocurre en el puerto de Montevideo”.
“Los trámites son tan largos y la burocracia extrema de nuestro país hacen que algo que para el Estado costaría muy poco haciéndolo a tiempo pase a costar millones de dólares. Es inexplicable”, dijo el empresario.
A su juicio, “hoy lo de Carmelo es noticia porque un pueblo casi queda aislado pero el tema de los barcos abandonados no es de ahora ni en Carmelo ni en Montevideo o Paysandú. Acá el mayor problema es la burocracia del Estado”, reiteró.
“Nosotros nos dedicamos al desguace naval y hace muchos años, cuando recién comenzamos, nos reunimos con las autoridades de ANP para plantear que queríamos trabajar en el desguace naval, por lo que nos gustaría adquirir barcos que estuvieran en situación de abandono. Luego de unas cuantas reuniones con dicho ente y después de cumplir con todos los requisitos necesarios para trabajar en los desguaces frente a Marina Mercante como Prefectura y ANP y quedando con todas las autorizaciones al día, se nos informa que todos los barcos que están en situación de abandono tienen que pasar por un proceso de papeleo que puede durar entre dos y cuatro años. Por lo tanto un barco que hoy está flotando y que al Estado le costaría muy poco retirarlo y dárselo a un privado para que lo desguace le termina saliendo millones de dólares favoreciendo a empresas que se dedican al reflotamiento de los mismos”.
ABANDONAN CUATRO
BARCOS POR AÑO
En el caso puntual de Montevideo “el mayor problema es que no existe un lugar específico para la tarea de desguace de embarcaciones. Cabe destacar que aparte de los barcos que hoy día se encuentran en el dique de cintura (cementerio de barcos) se le suman cuatro barcos más por año que quedan en las mismas condiciones. Si el Estado no busca una solución rápida para poder construir un lugar apropiado para poder trasladar embarcaciones que van a quedar para desguazar nunca se va a terminar con este problema y esto le sale al Estado muchos millones de dólares al año”, aseguró.
Mencionó “un ejemplo muy cercano y son los dos barcos que están abandonados en Paysandú. Estos se encontraban en Fray Bentos. Por medio de una licitación una empresa privada los adquirió cobrando más de 320 mil dólares para su retiro y desguace. Estos los trasladaron a Paysandú y ahí quedaron tirados corriendo el mismo riesgo que lo que acaba de suceder en el arroyo Las vacas”.
