Recomendaciones del Plan Agropecuario a ganaderos ante exceso de precipitaciones

Teniendo en cuenta el exceso hídrico ocasionado por las lluvias que en frecuencia y cantidad fueron mayores que las típicas en esta estación, el Instituto Plan Agropecuario recomienda a los productores ganaderos tener presentes ciertas medidas.
En cuanto a las pasturas (praderas, verdeos y mejoramientos), el ingeniero agrónomo Julio Perrachón dijo que “el crecimiento de las pasturas es mayor al esperado para esta época y se ha enlentecido su pérdida de calidad”.
Entiende que si bien, en situaciones de carga ajustada, “el pasto puede exceder el consumo de los animales, el forraje no cosechado constituye una inversión que permitirá reconstruir los tapices estimulando el aumento en la proporción de especies productivas, operando en forma similar que si lo hubiéramos cerrado para descanso”.
En el caso de las pasturas implantadas, explicó que lo recomendable es “presupuestar el forraje para los próximos 90 días, según la carga. Diferir forraje en pie para el invierno, eligiendo potreros con especies forrajeras que pierdan lo menos posible su calidad. En predios más intensivos, bajar la suplementación en la dieta, sin perder la producción individual. Hacer las reservas necesarias para los próximos 12 meses y evitar la acumulación excesiva de restos secos, para no dejar condiciones que propicien la aparición de hongo de la pradera (Pithomyces chartarum), causante de pérdidas productivas y hasta la muerte de bovinos”.
Para Perrachón, “el ensilar o enfardar el material no elimina el problema, porque las esporas del hongo resisten mucho tiempo. Ante la duda, se recomienda sacar una muestra del material y enviar a analizarlo”.
Sostuvo que en praderas de primer año “es necesario cuidar al máximo el piso, evitando la entrada de animales pesados”. Y agregó que “a pesar del exceso de forraje actual, es importante hacer un buen barbecho para sembrar los verdeos de invierno y las pasturas en fecha, como por ejemplo los cultivos de avena en febrero, los de raigrás a partir del 15 de marzo y las pasturas a partir de mediados de marzo”.
En las pasturas, verdeos y cultivos de verano, “es necesario el monitoreo semanal para detectar la posible presencia de plagas, como lagarta cogollera (spodoptera frugiperda), lagarta de la alfalfa, pulgones, etcétera, y malezas”.
En el caso del sorgo granífero sembrado en diciembre, “puede haber presencia de la mosquita de la panoja y la aparición del hongo Claviceps en la panoja del cultivo, disminuyendo los rendimientos y aumentando las posibilidades que el grano sea tóxico para el consumo animal”.

RESERVA FORRAJERA
“El forraje disponible es alto y sería conveniente realizar reservas, pero se dificulta el secado del material cortado, debido a los pocos días de sol y viento, punto clave para que la reserva tenga buena calidad y se mantenga en condiciones de ser consumida durante un tiempo prudente”, indica Perrachón.
Algunas opciones que propone para lograr un material de buena calidad son “cortar la pastura con máquinas más pequeñas que dejen una gavilla más fácil de secar, utilizar máquinas con deshidratador y buscar alternativas de reserva que requieran menos secado, como el silo de planta entera (65% humedad) o silopack (50% de humedad)”.

MANEJO Y SANIDAD EN VACUNOS
Por su parte, el doctor Alejandro Saravia, manifestó que “en vacas que se estén entorando, se recomienda realizar a la mitad del periodo el Diagnóstico de Actividad Ovárica (DAO), para conocer su estado reproductivo y tomar medidas que mejoren la situación reproductiva de los vientres. Este diagnóstico es más importante en vientres con su primera cría al pie”.
En este escenario, el profesional entiende que “es necesario monitorear el estado sanitario del ganado porque las condiciones son favorables para el desarrollo de varias enfermedades”.
En categorías jóvenes como terneros y sobreaños, “es clave un adecuado control de los parásitos gastrointestinales. Como las condiciones de alimentación no permiten sospechar que se está frente a cargas parasitarias importantes, mediante el análisis de materia fecal se puede conocer la carga parasitaria y decidir sobre la correcta dosificación de los animales en tiempo y forma, antes que aparezcan los síntomas clínicos, momento que ya hubo pérdidas”.
Agregó que “se debe tener un mayor control de Fasciola hepática o Saguaypé, por desbordes de ríos, cañadas y tajamares, ya que las condiciones para el huésped intermediario (caracol) son muy favorables y puede haber mayor oferta de formas infectantes”.
“Enfermedades infectocontagiosas como la Queratoconjuntivitis de los terneros, Leptospirosis o Clostridiosis como la Mancha, pueden encontrar también condiciones favorables, por lo que su prevención con vacunas disminuye su incidencia”.
Saravia recomienda “aumentar la frecuencia de las recorridas para monitorear todas las categorías, teniendo en cuenta que es época y el ambiente es propicio para la bichera. Las heridas provocadas por los caravaneos o castraciones tempranas motivan a que las moscas depositen sus huevos. También en situaciones donde se pastorean animales pesados pueden ocurrir casos de problemas podales”. En campos con garrapata, “se debe intensificar la vigilancia, ya que también para este parásito las condiciones son muy favorables”.