Con deudas al Banco República y otros acreedores por al menos 43 millones de dólares, la empresa Citrícola Salteña S.A., cuyas acciones pertenecen a la familia Caputto, solicitó ayer el concurso judicial de acreedores “debido a su situación económica-financiera”, según la nota enviada por el presidente del Directorio, Eduardo Caputto Frescuelo a la Bolsa de Valores de Montevideo, y a la que tuvo acceso EL TELEGRAFO.
Se pudo confirmar que solamente al Banco de la República le adeudan 21,5 millones de dólares, mientras que Nolir S.A. (fábrica de jugos) tiene una deuda de 1,2 millones de dólares.
También deben a otras instituciones bancarias y acreedores comerciales por más de 10 millones de dólares, y tienen como deuda también la emisión de Obligaciones Negociables por otros 11 millones de dólares, todo lo cual –en principio– significaría una deuda de al menos 43 millones de dólares. También mantienen deudas con los trabajadores, que comprende tres quincenas a los zafrales, más aguinaldo y licencias de 2017 y 2018, y adeudan salarios a los mensuales desde hace dos meses y medio.
La solicitud de concurso pasó al Juzgado correspondiente, y una vez que el juez decrete el concurso –de entenderlo aceptable– hay un plazo de hasta 180 días para que se cumpla con una junta de acreedores que acepte –o no– la propuesta de pago que puedan hacer.