“Yo tengo una visión positiva de la trazabilidad, cosa que no comparten muchos productores e incluso algunos colegas”, dijo a EL TELEGRAFO el ingeniero agrónomo Fernando Indarte. Reconoció que “es una buena herramienta, pero no la debería pagar los productores”.
El director de Indarte y Cía. señaló que “la única manera de saber cuánto influye la trazabilidad sería sacarla, pero sería una movida peligrosa”. Reconoció que el productor “es el que paga la trazabilidad.
Es una exigencia del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP), pero la paga el productor. Y contrariamente a lo que había declarado alguna vez el propio gobierno, que lo pagaba el Estado, no es así”, afirmó.
Y aseveró que “debería verse como algo que pague el estado, por los impuestos que recauda del sector, y que no lo pague el productor. Ahí confundimos costo, con si sirve o no, y creo que son dos cosas diferentes”, dijo.
“Me pregunto si tendríamos los mercados que hoy posee Uruguay si no tuviéramos trazabilidad. O el caso más reciente de Japón, del cual hablamos que es una buena noticia, y con seguridad que no nos habilitaban sin trazabilidad; por lo tanto tampoco tendríamos la noticia de que hicimos bien los deberes”, sostiene Indarte.
Personalmente entiende que es una buena herramienta. “En esto incluyo a la Cuota 481 que la tenemos por la trazabilidad, porque tenemos que demostrarle al comprador que el animal tiene menos de 30 meses el día de la faena, y es también la manera de demostrar que estuvo los últimos 120 días comiendo a granos, que es una de las exigencias”.
Agrega que “si bien permite controlar la parte sanitaria, como la brucelosis, vacunación contra aftosa y muchas cosas más, sirve para los mercados”.
Fernando Indarte no ve que “sea inteligente pedir que se saque, ni tampoco como se ha propuesto que no sea obligatoria y que la haga quien quiera. Porque es sabido que si no es obligatoria nadie la hace, porque además tiene sus complicaciones”, aclaró.
Entiende que ha ayudado a la parte financiera también. “Muchos fideicomisos privados o de bancos se basan estrictamente en la trazabilidad y por lo tanto el productor se ha financiado mucho más fácil de lo que es en créditos tradicionales de los bancos, poniendo su ganado en garantía”.
“Deberíamos sentarnos todos en una mesa y hablar del tema. Que participe el MGAP, el SNIG, los productores, industriales, consignatarios y objetivamente decir qué nos dio la trazabilidad. Plantear que mercados no tendríamos si no fuera por la trazabilidad”, manifestó.
“Hay opiniones a favor como la mía y otras que dicen que no”, expresa Indarte. “Pero no tenemos datos objetivos como por ejemplo que la Cuota 481 no la vamos a tener más si no hay trazabilidad, Japón no nos habilita y algún mercado también. Creo que la discusión debe ser más profunda”, puntualizó.
