El ministro de Economía, Danilo Astori, concurrió la semana pasada a la Comisión Permanente del Parlamento para explicar las variables utilizadas por el gobierno y que definen el incremento de las tarifas públicas. El secretario de Estado defendió la suba y sostuvo que no se puede analizar la evolución de los precios de manera nominal, si no que hay que considerar otros factores, en referencia a la evolución de la inflación. Según el ministro, para ajustar los precios se toma en cuenta la estructura de cada empresa y se proyecta la variación esperada de los precios de cada variable.
En el comienzo del año, se mantuvieron los precios de los combustibles, al tiempo que el resto de los servicios aumentaron por debajo de la inflación. La tarifa de UTE tuvo una suba general de 5,7 por ciento y Antel ajustó en promedio 7 por ciento. Por su parte, las tarifas de agua potable y saneamiento tuvieron una corrección de 7,8 por ciento, es decir a la par de la inflación que, al cierre de 2018, cerró en 7,96 por ciento.
La Federación de funcionarios de OSE (Ffose) insiste en la necesidad de una mayor inversión para facturar la totalidad del agua que produce el organismo.
El secretario de organización de Ffose, Carlos Sosa, dijo a EL TELEGRAFO que “lo que históricamente ha necesitado OSE es una mayor inversión porque precisa resolver los problemas de las pérdidas de agua. Como uruguayos pagamos una tarifa por el cien por ciento de lo que produce, pero el organismo recauda por el 46 por ciento. Esto significa que pagamos el doble porque alguien tiene que pagar por esa agua que se produce y la pagamos a través de las tarifas”.
Reconoció que “si se pierde el 50 por ciento quiere decir que esa agua perdida la pagamos todos. Si OSE es más eficiente en resolver los problemas de pérdidas, de robos o cualquier causa que genere ese 50 por ciento, se pagaría muchísimo menos”. Por otro lado, el sindicato apela al cuidado de las fuentes de agua, para evitar “comprar filtros especiales o pagar productos químicos. Allí también se reduciría la tarifa que debería ser universal porque si comparamos las tarifas de UTE, Antel y OSE, evidentemente la tarifa de agua resultará mínima”.
Incluso a nivel salarial, en comparación con otros organismos, según Ffose, “el ente se ubica a mitad de la tabla. En OSE tenemos algo más de cuatro mil funcionarios, cuando antes había unos doce mil”, aseguró Sosa.
Consultado sobre el avance de la tecnología para disminuir la cantidad de personal, el dirigente replicó: “yo puedo decir que no ha variado la forma de trabajo en los últimos 20 años, a pesar de la reducción de trabajadores”.
El dirigente consignó que “la reducción de personal no es tan real porque hoy tenemos los zafrales y los tercerizados que cubren tareas que pueden cumplir los funcionarios porque son propias de la carrera funcional. No se manifiestan dentro del rubro cero, o sea salarios, pero los uruguayos también tenemos que pagarlo”.
