La Unión de Bodegueros y Vitivinicultores de Paysandú considera “catastrófica” la situación del sector vitivinícola en el departamento, y en reunión cumplida con el presidente del Instituto Nacional de Vitivinicultores (Inavi), José María Lez Secchi, lamentaron el brusco descenso en la producción.
De acuerdo con datos brindados por el titular de Inavi, en ocho años el número de productores en el departamento pasó de 23 a 16, en tanto la producción bajó a más de la mitad.
Productores locales señalaron que “no hay reconversión de viñedos. El viticultor viejo quedó por el camino y no planta más, y no se rejuvenecen los viñedos”. Y para “hacer un viñedo actualmente, son unos 15.000 dólares por hectárea”. Explicaron que en la actualidad hay productores que se enfocan en el mercado local y otros en la exportación, siendo ahora el momento en que deben aprovechar para cosechar, dadas las circunstancias actuales. De cualquier forma, “el exceso de lluvias, con más de 500 milímetros, fue catastrófico para nuestra zafra”.
Por otra parte, al regir el cero alcohol, la rentabilidad del sector “es más complicada”, sostuvieron, explicando que “se puede comprobar fácilmente en algún restaurante cuántas botellas de vino hay sobre la mesa. Cada vez es menos y el consumo baja en forma abismal”.