Titular de ANP destaca acciones para captar cargas paraguayas y bolivianas en los puertos

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La Administración Nacional de Puertos (ANP) procura que el tráfico de cargas y contenedores entre Paraguay y el puerto de Montevideo se realice a través de la terminal fluvial sanducera, reduciendo así el transporte carretero entre nuestra ciudad y la capital del país. En ese sentido la ANP ha solicitado al Poder Ejecutivo, a través del Ministerio de Transporte y Obras Públicas, la autorización para los trámites aduaneros con vistas a la operativa de contenedores desde y hacia Paraguay, utilizando el puerto de Paysandú. En tanto, el titular de este organismo, Ing. Alberto Díaz, acompaña en estas horas a una misión boliviana que procura acelerar los trámites para facilitar el flujo de cargas bolivianas en los puertos uruguayos de Fray Bentos y Nueva Palmira.
El jerarca había manifestado que “hemos pedido al Poder Ejecutivo que autorice el traslado vía fluvial de los contenedores sin precinto electrónico desde Montevideo a Paysandú y que allí se coloque el dispositivo, porque hasta ahora no tenemos a esa ciudad como un punto donde se coloquen precintos”, indicó. Díaz confió en que “la autoridad portuaria y los navieros hemos pensado que la carga de fuera de la región puede venir con destino a Paysandú para luego salir por vía terrestre a Ciudad del Este u otro punto de Paraguay”. A su vez en las últimas horas el director de Operaciones de la Administración de Servicios Portuarios de Bolivia (ASP-B), Diego Arce, y el administrador de esa repartición en el puerto chileno de Arica, Cristian Jallaza, acompañados por el embajador de ese país en Uruguay, René Orellana Halkyer, fueron recibidos por Díaz, acompañado por los directores de la ANP Juan José Domínguez y Juan Curbelo, entre otras autoridades.
La visita se enmarca en el acuerdo operativo suscripto el 23 de enero en La Paz entre las autoridades portuarias de ambos países, por el cual se facilita la conectividad del comercio exterior boliviano con el océano Atlántico a través de la hidrovía Paraguay-Paraná. El documento prevé que la ANP le otorgue a la autoridad portuaria boliviana un depósito franco de 1.000 metros cuadrados, para almacenaje en Montevideo y en Nueva Palmira, y un área de oficinas para el trabajo administrativo del personal de la ASP-B. Luego de algunos intentos en los últimos años, “ahora estamos en buenas condiciones de que haya un flujo de carga boliviana en los puertos uruguayos”, dijo Díaz en la reunión, y señaló, además, que el organismo a su cargo procura que “Montevideo se diferencie de otros puertos de la región, por su profundidad, y que las navieras de ultramar lo elijan para trasbordos”. Agregó que “una de las misiones de la ANP es crecer con base en la conectividad, para lo que desarrolla una política de fidelización (de las navieras)”.
En ese sentido, recordó que las principales navieras que operan en el sur de América están presentes en Montevideo, como las europeas MSC, Maersk y Hapag Lloyd, y a ellas se le solicitará un espacio adecuado en las bodegas de los barcos para la carga boliviana.