Es posible afinar con más peso de cuerpo y de vellón

La evolución de las evaluaciones genéticas de las razas ovinas en el Uruguay ha demostrado que se logra afinar aumentando el peso de cuerpo y peso de vellón, manifestó el ingeniero agrónomo Fabio Montossi, director del Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria (INIA) y uno de los precursores en el trabajo de afinamiento de las lanas Merino en nuestro país.
El profesional explicó que ante este tipo de cuestionamientos la respuesta técnica está en la página web www.geneticaovina.com donde se encuentra toda la información de las razas ovinas del país. Allí se puede encontrar además de los datos de los animales generados en la investigación, la genética de los productores en sus propios predios.
Montossi dijo que pueden existir productores que deseen acelerar el proceso de afinamiento de sus lanas y por ende seleccionen carneros que permitan bajar cuatro micras aún siendo un carnero con un menor peso de vellón, como así también aquellos que busquen carneros con más peso de cuerpo y vellón y menor efecto en los micronajes, y aclaró que las decisiones son de cada productor de acuerdo a sus sistemas de producción.
Y que esto es posible quedó comprobado este viernes en el Día del Merino, actividad promovida por la Sociedad de Criadores de Merino Australiano del Uruguay (Scmau), el Secretariado Uruguayo de la Lana (SUL), y el propio INIA en la Agropecuaria de Salto.
El carnero ganador de cabaña “Los Arrayanes” de Álvaro y Alfredo Fros, fue un ejemplar destacado por los doctores Adolfo Casaretto (Jefe del Área de Transferencia del SUL), y Juan Carlos Tafernaberry (presidente de la Scmau), con un índice de 167 afinador, lanero 184 y doble propósito 177, datos verdaderamente disparados y datos objetivos muy fuertes”. Y afirmaron que el dato de peso de vellón sucio y “sobre todo en peso de vellón limpio, de cerca de 18 kilos, lo ubica en un perceptil netamente superior”, subrayaron.
Indicaron además, que el Día del Merino continúa “incorporando materiales afinadores con datos objetivos, procurando imprimir toda la potencia de la mejora genética de la evaluación global en estos animales”.
A esto debe agregarse los conceptos de Álvaro Fros, quien junto a su hermano Alfredo son los principales de la cabaña ganadora, quienes explicaron que para ellos el evento “es muy importante, porque se traen animales con muy buenos datos y muy bien fenotípicamente, por lo que andar bien acá es muy bueno”.
Y sobre el carnero ganador, expresaron que “está dentro de lo que busca la cabaña, con animales que aumenten mucho el peso del cuerpo y mucho el peso de vellón”. En este caso, el carnero ganador “aumenta muchísimo el peso de vellón limpio. Tiene un DEP en el percentil de 1% en la base de datos, que lo convierte en un animal muy destacado”.
Estos conceptos establecen muy claramente por donde pasa hoy en día el posicionamiento de la raza Merino Australiano en el país. Seguir afinando, pero con animales que aumenten peso del cuerpo y peso de vellón, determinando que la cuenta sea clara en el negocio y brinde una buena rentabilidad.