Artesana catamarqueña ganó el Premio Adquisición de la Semana

La Semana de la Cerveza, en el marco de su Muestra Artesanal, entregó este año –segundo consecutivo– el Premio Adquisición entre los artesanos presentes. En esta segunda edición el objeto premiado viajó desde lejos, más de 1.400 kilómetros, es un poncho de lana y lo presentó la catamarqueña Ruth Reinoso.
César Gutiérrez, director de Ferias y Artesanías de la Intendencia Departamental, además integrante del jurado que actuó, afirmó que este año “fue más complejo decidir, porque la cantidad de artesanos ha aumentado, pero aparte ha aumentado mucho el nivel”.
Agregó que lo que se buscó es que “más allá de lo que puede pensar el visitante, la pieza ganadora del Premio Adquisición sea una pieza que hable del oficio de ese rubro y que tenga cero fallas, que tenga un diseño personal, pero que a su vez también hable de lo que es el oficio y sea una pieza de maestría”.
Gutiérrez lo describió como “un poncho hilado a mano, extremadamente fina la fibra, la persona que lo hiló solo de eso podría ya dar cátedra perfectamente. Pero a eso le sumamos el valor agregado de un tejido hecho en un telar de cuadros aborigen, con una calidad extraordinaria, con terminaciones perfectas, con un calce perfecto, con un peso ideal, con una calidad de fibra excelente, y no dudamos que ese era el primer premio”.

ORGULLO
Reinoso se dijo sorprendida por la distinción, que considera un orgullo familiar, más que personal. “Muy contenta, sorprendida, porque la verdad que no me esperaba este reconocimiento. Es un honor, un orgullo, no solamente para mí sino también para mi familia, porque este emprendimiento de los tejidos en tela rústica viene desde hace muchísimo tiempo, de mi padre, mi madre, de mis abuelos, mis bisabuelos y que llegue a mí es una gran bendición de Dios”, expresó.
Reinoso detalló el proceso de elaboración de sus prendas. “Es todo artesanal, lavado a mano, hilado a mano de la fibra, lleva un proceso que puede demorar un mes de trabajo, desde que está la materia prima. Se teje en telar rústico, se urde, se alisa, luego se corta la tela del telar, se hace la costura en medio, se hace el fleco, se lava, se plancha y recién sale al mercado. Eso demora un mes, mes y medio desde iniciado el trabajo. Es lana de oveja”.

PREMIOS
El segundo premio se adjudicó a Ricardo Fraga, “es un artesano de Montevideo, integrante de la Asociación Uruguaya de Artesanos, con muchísimos galardones en el Premio Nacional de Artesanías, con un ajedrez en madera que tiene un diseño muy personal, con unas líneas muy interesantes, con terminaciones perfectas”, dijo Gutiérrez.
Se otorgó también un tercer premio “que fue para Javier Caputo, que hizo unos trabajos en resina y madera, que realmente son únicos, porque no hay nada como lo que él hace, eso es realmente destacable, es una firma personal muy fuerte, cualquiera que vea el trabajo de él, si ya sabe quién es, no duda que es suyo”, definió.
También hubo dos menciones especiales, “la primera de Mauro Martiní, que tiene muchos años, una gran trayectoria, con un trabajo brillante también en madera. María Eugenia Lema tuvo la segunda mención, que es una artesana joven, que el año pasado tuvo el reconocimiento en el Día del Artesano, que está trabajando muy bien. Va definiendo de a poco su estilo, en un rubro que es relativamente nuevo para nosotros como el fieltro”.
La otra distinción que se otorgó fue al mejor estand, “que fue de Alan Posse, un joyero que tiene un criterio muy homogéneo, le dio mucha altura a las piezas y eso hace que para el cliente sea muy fácil apreciarla, y eso se hace con oficio”.
El primer premio, el Premio Adquisición, consiste en la compra de la pieza por un valor de U$S 500, o su equivalente en moneda nacional. El segundo, el tercero y las menciones tendrán el estand gratis en la feria el año que viene.