Las precipitaciones registradas este lunes en buena parte del litoral del país, frenaron la cosecha de soja que se inició la semana pasada, y con rendimientos para las primeras chacras cerradas consideradas de buenas a muy buenas por el momento, con excepciones muy puntuales.
Precisamente la cosecha comenzó a avanzar en estos últimos días, aunque técnicos consultados por EL TELEGRAFO, indicaron que este lunes fue “muy particular”, porque debido a los anuncios de lluvias para la tarde de ayer, varios productores optaron por esperar y ver como se comportaba el factor climático, y reanudar hoy o mañana, ni bien se puede ingresar a las chacras.
“Hace una semana venimos recibiendo lo que se cosecha en la región y con rendimientos dispares”, manifestó a EL TELEGRAFO Sergio Pastorini. Explicó que al Este de ruta 3, Palmar de Quebracho, Santa Kilda y Chapicuy la situación no ha sido de las mejores porque no llueve desde el 20 de febrero, incidiendo claramente en el peso de la chaucha y con un grano chico y liviano”.
El empresario sanducero acotó que en esas zonas donde no llovió oportunamente, “los rendimientos oscilan entre 2.300 y 2.400 kilos por hectárea”.
En cambio, precisó que los rendimientos son mejores para el lado del río Uruguay, “con chacras que oscilan desde 3.300 a 3.500 kilos por hectárea”.
Pastorini sostiene que “se cosecha suave, y recortando a donde se puede entrar porque hay muchos cultivos que están verdes aún”. Además, aclaró que “estamos frente a una cosecha que no se va a aprontar de apuro. Será más lenta y va a durar algo más y seguramente se irá hasta fines de mayo”.
Sobre el cultivo de maíz que prácticamente ya ha sido trillado, el empresario quebrachense precisó que “lo cosechado anda entre 7.000 y 9.000 kilos por hectárea”, en tanto expresó que las lluvias de este lunes “no vienen mal, porque son necesarias para las pasturas y el final de algunas sojas”.
En cambio Gonzalo Chialanza de Nuevo Surco SRL comentó a EL TELEGRAFO que por el momento la cosecha “comenzó suave”, y seguramente en los próximos días y especialmente la semana que viene habrá mayor cantidad de chacras cosechadas.
“Estamos prácticamente cerrando una chacra en la zona de Colonia 19 de Abril y con unos 3.000 kilos por hectárea, y tal vez algo más, pero en la zona de Guaviyú se da a la inversa, y apuntaba para ese rendimiento pero seguramente estará algo por debajo”.
Se refirió al clima, indicando que “teníamos 2 chacras para arrancar este lunes, pero viendo como coincidían los anuncios de agua para la tarde, se suspendieron para comenzar este martes, o cuando se pueda ingresar a cosechar”.
El ingeniero agrónomo Luis Simeán explicó que “por el momento los rendimientos son considerados normales, y van desde 2.300 hasta 3.200 las mejores”.
El gerente de Copagran filial Paysandú, aclaró que “es lo que vamos viendo hasta el momento”, y habrá que aguardar cuando se podrá ingresar nuevamente tras éstas lluvias.
Para el ingeniero agrónomo Miguel Pastorini de Agrocentro, “las chacras con menores rendimientos están en el entorno de 2.400 kilos y máximos de 3.400 kilos, pero no son muchas las que se han cerrado hasta el momento”.
También aclaró que “habrá que esperar el impacto de las lluvias, y cuando se podrá reingresar a las chacras a levantar el grano”. Si se concretan también las precipitaciones anunciadas para viernes y sábado de esta semana, “será clave lo que suceda la próxima semana con el tiempo”.
EN SUDAMÉRICA
Con Brasil habiendo cosechado el 80% del área de soja y Argentina con un avance del 10%, se puede anticipar que la cosecha sudamericana está cumplida. Ante esta situación, restaría únicamente sumar el desempeño de Uruguay para completar el panorama y brindar mayor tranquilidad.
Para el ingeniero agrónomo Carlos Sánchez Negrete, asesor de ADP, “a la buena cosecha sudamericana se suman, además, los 73,9 millones de toneladas de stock de soja que posee Estados Unidos, cifra informada recientemente por el Departamento de Agricultura (USDA). Este stock es el más alto de los últimos 30 años y se posicionó 0,9 millones de toneladas por encima de lo que el mercado pronosticaba”.
Asimismo, los datos informados para el maíz “también influyeron en la baja de los precios de la soja. El stock de maíz en Estados Unidos al 1 de marzo fue 6,9 millones de toneladas superior a los que esperaban los analistas”.
En relación a la guerra comercial entre Estados Unidos y China, el profesional señaló que “las noticias de un muy probable arreglo en la disputa entre ambas potencias, con rumores de renovadas compras de productos agrícolas, lograron que el mercado de Chicago se fortaleciera un tanto”.
Sin embargo, como ya ha sucedido anteriormente, “la falta de confirmación y detalles precisos sobre las nuevas compras por parte del país asiático llevaron a que las subas fueran temporales. Lo concreto es que actualmente China ha comprado a Estados Unidos 13 millones de toneladas, de las cuales ha embarcado solo 5 millones. En tanto, a igual fecha del año pasado, había adquirido 29 millones de toneladas y había embarcado 26 millones de toneladas”.
Por lo tanto, para observar una reacción fuerte en el mercado de Chicago, “se debería apreciar un importante compromiso de compra de China, justo en un momento donde la soja sudamericana tiene precios más competitivos”.
Pese a todo lo anterior, “cabe mantener una mirada optimista, ya que todos esos datos son parte de la realidad actual y están incluidos en los precios”, puntualizó Sánchez Negrete. “Hacia fines de abril comienza la etapa de siembra en Estados Unidos y posteriormente, durante el verano se dará el mercado climático”.
Si el mercado logra mantenerse en estos niveles, “sin hacer nuevos pisos ante la presión del ingreso de la cosecha sudamericana, es probable que la incertidumbre de la nueva campaña de Estados Unidos ponga más adelante alguna prima de riesgo en los precios”, detalló el asesor de Agronegocios del Plata.
BUENOS RINDES DE MAÍZ
Las estimaciones de un muy buen año productivo para el cultivo de maíz de primera se confirmaron tras la trilla del 100% del área. El rendimiento promedio fue de 10.951 kilos por hectárea, “esto ya es grano seco y limpio”, indicó el ingeniero agrónomo Alexis González.
Sostuvo que el clima “ayudó mucho para lograr estos rendimientos, pero también aportaron a estos resultados la planificación y la utilización de buena tecnología. Por ejemplo, se seleccionaron para maíz de primera solo los mejores ambientes de los campos (ambientes A en zonas bajas), después se seleccionó un híbrido de alto potencial para esos buenos ambientes, además se utilizó una fertilización fuerte para intentar captar el máximo potencial posible de esos ambientes e híbridos.
