El Municipio de Guichón “casi al final del período recién –al parecer– podrá realizar las primeras cuadras de bitumen que tenía planificadas desde el mismo comienzo” dijo la alcaldesa Lourdes Suárez.
“Al comienzo de nuestro período de gobierno, cuando se hizo el presupuesto, planificamos realizar 125 cuadras de bitumen en Guichón, porque eran y son necesarias pero resulta que el intendente rechazó eso y dejó solamente en 50 la cantidad posible”, explicó Suárez. “Como se sabe, los municipios dependemos del intendente para hacer uso de nuestros recursos. Sufriendo la población, por supuesto, porque el estado de las calles es bastante malo y a quien miran primero es a la alcaldesa que camina esas mismas calles”, agregó.
“Recién ahora nos autorizaron a pedir los materiales para hacer las primeras 17 cuadras de bitumen de todo el periodo. Parece que comenzarán a llegar los primeros camiones con piedra para poder bituminizar. Es lo que se dice desde Paysandú; ojalá podamos comenzar a cumplir este anhelo de todos los guichonenses, de tener mejores calles y una circulación más fluida”, dijo la alcaldesa de Guichón.
Por otra parte, aseguró tener “importantes problemas para llevar adelante los trabajos de caminería rural, en la medida que solamente contamos con una motoniveladora y una aplanadora. Otras dos han pasado la mayor parte de estos cuatro años rotas, se han podido usar muy poco. Entonces con un solo equipo no es posible cumplir con todo el territorio, porque es demasiado grande”.
“Hay dos máquinas que tienen el cigüeñal roto y en tanto tenemos pendientes trabajos en caminería cerca de Arbolito, llegamos hasta Tacuarembó por Salsipuedes, hasta Cuchilla del Fuego y vamos por todas las colonias. Si arreglamos el Este rumbo a Tacuarembó hay problemas en las colonias cerca de Guichón. Es un territorio con mucho tránsito, con mucha carga en forestación y granos”, explicó.
Contó que un ómnibus quedó atrapado “en un camino muy blando, a unos tres kilómetros desde Morató a Tiatucurá, lo que fue muy raro porque por las fuertes lluvias previas se sabía que el arroyo Sarandí no daba paso, estaba totalmente desbordado. Fue raro cómo un ómnibus –que hace la línea dos veces por semana– intentó algo que debió saber era imposible realizar”.
En esa zona “muy blanda tuvimos que colocar unos 70 camiones de material en cinco kilómetros. Nos preocupa mucho el cumplimiento con la caminería por los vecinos, los productores, los ómnibus, las empresas que utilizan esos caminos”.
“Ya habíamos apreciado esto a comienzos de año”, aseguró Lourdes Suárez. Tanto que “tras las fuertes lluvias de enero declaramos la emergencia vía en todo el territorio del Municipio. Pero resulta que vinieron directores y técnicos de la Intendencia y decidieron que no era tan grave la situación. Obviamente tenemos una mirada muy diferente de la del gobierno departamental de lo que es la caminería rural y de la importancia de mantenerla adecuadamente. Nosotros vimos la realidad y así declaramos emergencia vial, porque es lo que correspondía. No recibimos el apoyo imprescindible y así está nuestra caminería. Hacemos todo lo que podemos, pero sabemos que no es todo lo que se necesita”.
“El nuestro es un municipio muy grande y por cierto que tenemos muy buena recaudación en nuestras oficinas. Pero que nadie se llame a engaño, nada de ese dinero queda para nuestro uso, todo debe ser enviado a la Intendencia de Paysandú. Y después, conseguir apoyo para obras es realmente un trabajo muy duro”, concluyó la titular del Municipio de Guichón.