La Celeste entrenó y viajó a Porto Alegre

El debut quedó atrás, y luego del triunfo frente a Ecuador por el Grupo C de la Copa América, la selección uruguaya volvió a los entrenamientos para luego volar rumbo a Porto Alegre, donde el jueves se las verá ante Japón.
Como era de esperar tras la goleada frente a Ecuador, el día después fue totalmente distendido, más allá de recibir la mala nueva de la lesión de Vecino.
Como estaba planificado, el plantel se trasladó a Cidade do Galo, el centro de entrenamiento del Atlético Mineiro, donde llevó a cabo la sesión de gimnasio, apuntando a distender tensiones tras el compromiso del día anterior. Y luego se movilizaron más intensamente aquellos jugadores que no fueron de la partida.
En la tarde, la delegación partió rumbo a Porto Alegre, sede del partido del próximo jueves ante Japón, que se desarrollará en el Arena do Gremio desde la hora 20.
Los celestes se alojaron en el hotel Deville Prime, estando previsto que esta tarde se trabaje a puertas cerradas en el complejo Luiz Carvalho de Gremio.
Luego del almuerzo, habrá conferencia de prensa de dos jugadores en el hotel.
Más allá de que Uruguay supo enfrentar el pasado año a Japón, que se impuso por 4 a 3 a los celestes, el cuerpo técnico y los jugadores sacaron conclusiones de la presentación de anoche de los nipones, así como de Chile, el último rival de la serie.
Tabárez no realizaría, en lo previo, más variantes que la obligada por la ausencia de Vecino para encarar el segundo partido, aunque podrían tomarse precauciones teniendo en cuenta la velocidad de los asiáticos, en base a lo visto y a lo vivido el pasado año en aquel amistoso.
“Esa velocidad, esa explosión que tiene Japón para ir al ataque, provocaron un desgaste grande y se vio en los últimos minutos que teníamos muchos problemas de rendimiento desde el punto de vista físico”, había señalado el técnico celeste en aquella ocasión, tras caer por 4 a 3.