Será la tercera vez que se hace la sub base de la ruta 90 en ocho años

El Ministerio de Transporte y Obras Públicas ya gastó más de seis millones de dólares y gastará unos tres millones más en la reconstrucción de los 22 kilómetros de la ruta 90 desde Piedras Coloradas hasta la ruta 25. Aunque hay trabajos que no se repiten, como la construcción de alcantarillas, la ruta deberá ser levantada en su totalidad para hacer la subbase y base totalmente nueva, para finalmente instalar el tratamiento bituminoso doble.
En 2011, el trabajo en la ruta fue licitado e iniciado en sus primeros 8 kilómetros, y después de un paréntesis en la obra, fue recomenzada por la empresa Colier S.A. en 2013, aunque hubo que “levantar” toda la subbase que ya se había colocado, debido a que la tosca natural utilizada no era la indicada para ese tipo de ruta, con tránsito pesado.
Así lo consignó en nota publicada el 16 de abril de 2013 el entonces diputado nacionalista por Paysandú, Miguel Otegui, tras una reunión con quien era Ministro de Transporte y Obras Públicas, Enrique Pintado. En esa oportunidad, Pintado dijo a Otegui que por “dificultades en el material utilizado por diferencias en el análisis físico de la tosca, técnicamente llamado CBR, hubo que cambiar el mismo, generando las complicaciones y molestias que significaron las quejas de los vecinos de Piedras Coloradas y los usuarios de la ruta”, y que “la empresa continuará con los trabajos tal y como estaba previsto, mientras se desarrolla una investigación interna en el Ministerio para conocer cómo pudo suceder que el material base, la tosca, no fuera del tipo indicado para el ensanche de la ruta 90, por lo que luego de la inspección hubo que levantar todo lo colocado por la empresa constructora”. “Alguien no controló como debía”, dijo en aquel momento Otegui a EL TELEGRAFO.
En dicha oportunidad, además se aseguraba que “estos trabajos se hacen previendo una resistencia de la ruta para el peso de 45 toneladas de madera que usualmente recorren esa carretera, y se prevé una vida útil de unos 10 años”. Sin embargo, a siete años de haberse terminado la reconstrucción total de ese tramo de ruta, se hace necesario levantarla y volver a realizar los trabajos desde la subbase.
Entre 2011 –comenzó en mayo de ese año– y 2013, la obra comprendió ensanche de alcantarillas y de plataforma a 7,20 metros de firme y unos dos metros de banquina pavimentada con corrección altimétrica entre los kilómetros 48 y 73, donde se hizo recargo de material granular (30 centímetros de tosca) y luego tratamiento bituminoso doble.