Sin negocios en el mercado interno de lana y permanece receso en el exterior

“Estamos en un receso del mercado en el exterior, con los los últimos remates llevados a cabo la semana anterior, cerrando con una tendencia al alza, después de varias bajas consecutivas”, manifestó a EL TELEGRAFO Carlos Andrés Moriondo.
El rematador salteño consideró que por el momento, “el mercado interno de lanas está frío si lo comparamos con años anteriores en donde tuvimos corridas en el lomo bastante grandes, visualizándose algún negocio puntual en lanas Corriedale gruesa en el departamento de Artigas”.
Respecto a lo fino, el consignatario señaló que “no hay negocios, más allá que si se reciben consultas de la demanda”, al tiempo de reconocer que “somos tomadores de precios, habrá que ir viendo como se presenta la zafra”.
Explicó que “algún remanente de lana del año pasado quedó en el galpón. Y hay productores que esquilaron en ésta zafra y tienen también los lotes prontos en el litoral norte”.
Para el entrevistado “los productores están con expectativas de vender a valores similares del año pasado, a pesar de que el mercado hoy está frío”. Pero acotó que “los valores del ganado vacuno están ayudando, por lo que el productor aprovechó para sacar haciendas del campo, lo que genera que no haya presión vendedora”.
El promedio de los últimos tres años de ventas de lana “ha sido realmente muy bueno”, lo que según Moriondo lleva a que el productor “especialice más su esquila, buscando mejores métodos y procurando que su lana sea grifa verde para lograr el mejor precio ante la grifa celeste, o quienes no acondicionan”.
Apuntó además al mejoramiento genético de las majadas, “con productores que han realizado buenas inversiones para mejorar la calidad y finura de su lana”. A esto se suma que “este año habrá algo más de lana, debido a que algunos productores se animaron a guardar borregos para lograr vellones hoy como capones, y también a encarnerar vientres que antes no se hacía”.

CARNE OVINA
Respecto a la carne ovina, expresó que “está demandada y recién está comenzando a armarse el mercado, con la oveja pagándose en el entorno de U$S 1,40 hasta 1,43 en primera balanza, en tanto los capones y corderos saldrán más adelante”.
El año pasado con las esquilas tradicionales “se complicó mucho la entrada de las ovejas, porque la industria va más hacia el cordero mamón, y hubo algún que otro tapón grande. Pero ahora los precios son firmes y con entradas rápidas”, dijo Moriondo.