Preparador físico de la selección uruguaya de rugby y de Trébol, Guillermo Selves, el “Mono” como muchos le dicen, ha sido uno de los puntales en el éxito de Los Teros, con la clasificación al Mundial de Japón –que arranca en breve–, y con el título del albiverde como campeón uruguayo por primera vez en su historia.
Mientras organizaba el calentamiento previo al partido entre Uruguay y Argentina XV –el pasado sábado 7 en el Estadio Charrúa de Montevideo–, el último amistoso antes de viajar a tierras niponas, Selves tuvo tiempo para conversar con EL TELEGRAFO sobre la labor realizada de cara a la cita mundialista, con un trabajo puntual en este último tiempo.
“Hicimos una preparación específica de dos meses, con dos fases bien separadas. Cuatro semanas la primera, y cuatro la segunda. En la primera, se apuntó en un 80% a lo físico y fue la parte más dura de la preparación, donde se lograron cosas que capaz nunca se hicieron en Uruguay. Vinieron preparadores físicos de Inglaterra y de Irlanda, a entrenar y a armar el plan, lo que potenció todo, algo impresionante. Fue una experiencia increíble. Y en las últimas cuatro semanas se dio un vuelco y se hizo mucho más rugby, aunque la parte física siempre siguió”, explicó el preparador físico.
Selves detalló que desde el extranjero también llegaron especialistas en el line, en patadas, en defensa, para pasar a conformar un staff técnico de 15 personas, algo “único en Uruguay”. Por eso, la Celeste “llega muy bien al Mundial, comparándonos con equipos Tier 2 (dentro del ranking de la World Rugby) estamos a la altura de cualquiera. Vamos con la cabeza de impresionar con lo que podemos llegar a hacer, ese es nuestro objetivo y mentalidad”.
Sobre ese último aspecto, el sanducero indicó que se insistió en el trabajo de “construir equipo”, y que resultó fundamental el aporte de Cragi White, un psicólogo inglés “capo en esa área” (el británico hasta los metió a hacer yoga). “El equipo mentalmente está por arriba comparado con otros momentos, como cuando se clasificó contra Canadá”, manifestó Selves.
Esa clasificación temprana al Mundial, lograda en febrero de 2018 tras vencer en los dos partidos a los canadienses, sirvió para organizar el plan de cara a Japón. No obstante, hay que mirar un poco más atrás para analizar este proceso. “Esto es el fruto de los cuatro años de preparación, un proceso de cuatro años con este staff. Desde 2016, se ha dado un cúmulo de cosas. Realmente, se potenció en estos dos meses, pero es un trabajo que ya viene desde hace tiempo”, recalcó.
Sanduceros
Selves tuvo palabras acerca de los dos jugadores sanduceros, provenientes de Trébol, que integran la selección uruguaya. Juan Pedro Rombys “ha tenido un cambio impresionante, increíble lo que mejoró, tanto en físico como en rugby. Era un desafío grande para él, estaba fuera de la selección desde hace unos años. Sin dudas respondió, colmó las expectativas, cada objetivo que teníamos con él, las cumplía cada semana”, dijo sobre el primera línea que volvió a Los Teros después de más de una década. El otro de Paysandú, Agustín Della Corte, “viene de procesos de M20, no le costó tanto, pero también hizo un cambio importantísimo y está muy bien”.