La Acacia celebró su primer remate en casa con el 100% de ventas y toros a U$S 3.046

La familia Martigani, los hermanos Gonzalo y Fernando Indarte, y Martín Pereira,junto al martillero Walter Hugo Abelenda al comienzo del remate.

Era un día de celebración, y bien que así sucedió. La familia de Octavio Martigani realizó el 8º remate anual pero el primero en las instalaciones construidas en el establecimiento de la zona de Santana, a 15 kilómetros de Guichón, departamento de Paysandú, y con muchos clientes y amigos acompañándolos, comercializaron el 100% de la oferta de toros y vientres.
La subasta, que estuvo a cargo de Indarte y Cía., y con el martillo de Walter Hugo Abelenda, comenzó con un reconocimiento de la firma rematadora a la familia Martigani, por el esfuerzo realizado y la excelente presentación del hermoso local de ventas. Pero también los anfitriones reconocieron a Andrés Perfecto y su hijo Juan, por el apoyo brindado, “especialmente cuando por una fractura no pude realizar varias actividades”, comentó Octavio Martigani (h).
Tras los agradecimientos, llegaron las ventas. Y comenzaron con los vientres, que se dispersaron fluidamente y con una demanda ávida por lo que ingresó a la coqueta pista de ventas.
Las 38 vaquillonas preñadas SA se pagaron entre 970 y 940, promedio U$S 953; 12 vaquillonas SA abiertas U$S 750; 20 vacas SA preñadas entre 860 y 850, promedio U$S 855; 9 vacas SA con servicio U$S 700; 5 vacas SA preñadas entre 950 y 930, promedio U$S 938. Y le siguieron los vientres de pedigrí. Fueron 5 vaquillonas PI abiertas entre 750 y 600, promedio U$S 660; 7 vaquillonas PI preñadas entre 940 y 850, promedio U$S 904; 4 vacas PI abiertas U$S 720; 13 vacas PI preñadas entre 1.120 y 880, promedio U$S 950; y las 6 piezas de cría U$S 760.
Los toros no desentonaron y la demanda pujó por cada uno de ellos. Se vendieron 4 toros PI de 2 años entre U$S 4.550 (por el toro colorado Copa de Honor de las exposiciones de Guichón y Paysandú) y U$S 3.700 por dos de ellos, promedio U$S 3.975.
Le siguieron los 39 toros PI de 3 años que se dispersaron entre 3.650 y 2.000 (por los dos últimos toros ofrecidos) y promedio de U$S 2.906. Finalmente se vendió Roque en U$S 4.800, toro plantelero de La Acacia que compró Rincón de Arocena. De esta forma, los 44 toros vendidos promediaron U$S 3.046.
El ingeniero agrónomo Fernando Indarte se mostró “muy contento” por el resultado del remate, “porque además significó el debut en el local recientemente construido, lo que fue un gran acierto, porque los toros se ven de otra manera y en forma más ordenada”.
Mencionó que se obtuvieron valores “destacadísimos, tanto en los vientres de pedigrí como SA, al igual que los vacíos y preñados, y muy demandado el remate de toros, a tal punto que se vendieron todos”.
Por su parte, Octavio Martigani (h), manifestó que “fue un remate increíble para nosotros, por la cantidad de gente que vino desde temprano, y el buen resultado del remate que nos dejó muy satisfechos”.
Fue un remate con todos los condimentos. Gente, buenos precios, ventas totales, y el recuerdo de la exitosa primera jornada en la propia casa. Bien para el disfrute y seguir mirando para adelante como lo hace desde hace varios años la familia Martigani.