Cambios en los hábitos alimenticios marcan leve baja en consumo de carne

La carne de pollo es la segunda más consumida en nuestro país.

Un estudio de la consultora Factum para el Instituto Nacional de Carnes (INAC), señaló que cada uruguayo consume dos kilos de carne por semana y que ocho de cada diez lo hace al menos dos días por semana. Y aunque el consumo de carne sigue alta en el país, de 100 kilos por persona al año, los cambios en los hábitos alimenticios marcaron una leve baja.
La carne más consumida es la de vacuno: 98% de la población; seguida por la de pollo (83%), de cerdo (51%) y pescado (45%).
Otros de los datos recabados es que en carne de vacuno, el 99 % de los hogares compró el producto durante el mes; tres de cada cuatro consume carne todos los días, y uno de cada diez hogares tiene integrantes que no consumen carnes.
Ese último dato (uno de cada diez hogares tiene integrantes que no consumen carnes) se debe a la llegada de las dietas vegetarianas o veganas, y explica que en los últimos meses se detectó una leve baja en el consumo. Estamos ante una tendencia mundial que también se registra en Estados Unidos y Europa, dijo el presidente del INAC, ingeniero agrónomo Federico Staham citado por Subrayado.
El 66% de los uruguayos consume carne en reuniones familiares y el 86% lo hace los días domingos.
En junio de este año Stanham se había referido al “cambio de hábitos” en la población. En la oportunidad dijo que la caída del consumo no es un hecho aislado en el Uruguay, ya que más y más personas van decidiendo dejar de comer carne debido a temas ambientales.
Además algunas informaciones advierten que en 2040 el 60% de la carne del mundo tendrá su origen en procedimientos in vitro o de productos de origen vegetal que simularán ser carne cuando en la realidad no lo son.
The Guardian publicó un reporte de la consultora internacional AT Kearney que dice que “la industria ganadera a gran escala es vista por muchos como un mal innecesario”. “Con las ventajas de los nuevos sustitutos de carne vegana y de la carne cultivada sobre la carne producida de manera convencional, es solo una cuestión de tiempo antes de que capturen una cuota de mercado sustancial”, afirma.
“El cambio es inevitable ya que muchos consumidores reducen su consumo de carne como resultado de ser más conscientes del medioambiente y del bienestar animal”, dijo Carsten Gerhardt vocero de AT Kearney.