Eran pasadas las 5:30 del jueves cuando varios habitantes de la ciudad de Quebracho, a unos 50 kilómetros al Norte de Paysandú, vieron una extraña nube alargada que asomaba desde el Este. Flotó en el cielo quebrachense hasta aproximadamente las 6:15, cuando “se comenzó a desarmar”, según dijo a EL TELEGRAFO Oldemar Chacón.
“Estaba como estática, sin movimiento, y después se fue desarmando, desparramándose en el cielo”, comentó el vecino, agregando que la dirección era claramente de Este a Oeste.
Las nubes rodillo pertenecen al género de nubes Arcus, una variedad de cumulonimbo. Los cumulonimbos son nubes bajas de desarrollo vertical formadas a partir de una nube de tipo cúmulo.
Según datos de Internet, “estas extrañas nubes largas se pueden formar cerca de frentes fríos que avanzan. En particular, una corriente descendente procedente de un frente de tormenta puede hacer que el aire caliente y húmedo se eleve, se enfríe por debajo del punto de rocío y forme una nube. Cuando esto ocurre de manera uniforme a lo largo de un frente amplio, entonces se puede formar una nube carrete. Las nubes rodillo pueden contener aire que circula a lo largo del eje horizontal de la nube”.