El Sunca apuesta al diálogo social para reactivar el empleo

Carlos González, dirigente del Sunca.

El Sindicato Único Nacional de la Construcción y Anexos (Sunca) propone la convocatoria a un diálogo departamental por el empleo, de similares características al proyecto “El Paysandú que queremos”, a partir del impacto que tuvo la pandemia del coronavirus a nivel local. Una vez finalizada la licencia especial de la construcción, los trabajadores de la construcción volvieron a las obras el 13 de abril, con una opinión crítica en cuanto a las condiciones laborales y el retorno al seguro de desempleo de miles de obreros de la construcción.
“Sabíamos que inmediatamente de retomar la licencia en la construcción no estarían las condiciones dadas para entrar a trabajar en las obras. Fue así que 45.000 trabajadores ingresaron el 13 de abril, sin pensar en las consecuencias de aglomerar a tantas personas en los centros de trabajo”, señaló a EL TELEGRAFO el dirigente departamental Carlos González.
La departamental del Sunca recorre las obras en la ciudad, “y cada día de la semana hacemos asambleas en los lugares de trabajo, donde constatamos que lamentablemente las condiciones no están dadas, tal como nosotros decíamos. Pero todo dependerá de la voluntad de los trabajadores para que reclamen el protocolo de salubridad y de higiene que hay que respetar y hacer respetar”.
Explicó que las reivindicaciones “no solamente pasan por el salario, sino por la salud. Más allá de que el gobierno ha realizado inspecciones y sorteado a los trabajadores para hacer los tests, por ahora es solo en Montevideo, Canelones y Maldonado, donde están las grandes obras. No así en el Interior, donde hasta ahora no ha pasado nada, pero la idea es que se hagan en todo el territorio nacional”.

EN EL SEGURO

González reconoció que “aún no tenemos las cifras exactas, pero no menos de 5.000 trabajadores de la construcción y sus ramas afines retornaron al seguro de paro una vez que volvieron a las obras el pasado 13 de abril. Porque abarca no solamente a las obras de gran envergadura, sino todo lo que se paralizó con las obras chicas, por ejemplo las que se realizaban en casas particulares. La gente tiene miedo todavía de aceptar a otras personas en sus casas”.
Dentro de las cifras macro “incluimos a los 600 trabajadores afectados tanto en Maldonado como en Treinta y Tres, donde se realizan las obras en la cementera ‘Cielo Azul’. Pero también tenemos problemas con la obra de UPM”.
Explicó que “en el caso de la construcción propusimos el envío al seguro de desempleo mientras durara la emergencia sanitaria, pero eso no podía concretarse porque tenemos que manejarnos de manera general. Y en este caso, van al seguro aquellos a quienes le corresponde el beneficio y varios trabajadores lamentablemente no reúnen las condiciones para entrar al seguro”. En tal sentido, el Pit Cnt reiteró su reclamo de establecer una renta básica y “pedir por esos trabajadores que no pueden acceder al seguro”.

DIÁLOGO DEPARTAMENTAL

El sindicato apuesta a un diálogo departamental por el trabajo. “Conversamos con el sector empresarial y el plenario departamental del Pit Cnt para poner sobre la mesa algo similar a lo que fue en su momento el proyecto ‘El Paysandú que queremos’, donde todos propongamos sin banderías políticas ni egos personales y salir con objetivos centrales para poner en marcha al departamento”. Según González, “después de la pandemia quedará el tendal de empresas que lamentablemente no van a generar puestos de trabajo, con más trabajadores en el seguro. Y ahí comenzará la miseria realmente”, concluyó.