En el marco de la serie de operativos de requisas generales que realiza la dirección del Instituto Nacional de Rehabilitación a nivel nacional, en la víspera se efectuó uno en la Unidad 16, conocida como la excárcel departamental.
Próximo a las 7, personal del INR con apoyo de efectivos del Grupo de Respuesta Táctica de la Jefatura de Paysandú se presentaron en la explanada del edificio donde el jefe de operativo, comisario mayor Luis González, dio los lineamientos para seguir en el interior.
Una vez constatada la situación en cada pabellón, los encargados del operativo fueron tomando e identificando cada efecto incautado. Al finalizar se contabilizó un total de 93 cortes de fabricación carcelaria, 32 celulares, 11 plantines de marihuana, 15 prendas oscuras (tono que no está permitido para evitar lucir igual que el personal), 2 envoltorios con sustancia blanca similar a la cocaína, 4 envoltorios de sustancia vegetal similar a la marihuana, 250 pesos uruguayos y 5 litros de bebida fermentada casera denominada en la jerga como “escabio”. En tal sentido, González manifestó que se busca siempre “identificar las causas (del ingreso de ciertos efectos) y estamos con constante corrección y ajuste de los protocolos del INR. Sin dudas que es una problemática que tenemos a la que debemos seguir enfrentando”. Asimismo, comentó que los cortes carcelarios hallados fueron realizados con material dañado de la propia unidad penitenciaria que alberga a unas 256 personas privadas de libertad.
PLAN DE DIGNIDAD CARCELARIA
En tanto, una delegación encabezada por el ministro del Interior, Jorge Larrañaga, expuso ante la Comisión Bicameral de Seguimiento Carcelario del Poder Legislativo el estado de situación actual del sistema penitenciario en Uruguay y los lineamientos de acción para el quinquenio.
El ministro expuso sobre los doce puntos que conforman el plan y evidenció a través de material audiovisual las condiciones edilicias en las que su administración recibió los centros. Explicó que el estado de las Unidades condiciona la rehabilitación y roza la violación de los derechos humanos.
Además, señaló que la situación actual representa un desafío por su complejidad. “La situación carcelaria es grave, tenemos un sistema penitenciario que presenta colapsos desde el punto de vista edilicio, pero también hay una población carcelaria excesiva y donde además hay problemas notorios en el marco de las adicciones”, explicó Larrañaga.
También hizo uso de la palabra el director del Instituto Nacional de Rehabilitación, Luis Mendoza, quien realizó un informe cuantitativo sobre el estado de situación general de los 26 establecimientos penitenciarios de todo el país y mencionó las principales medidas que se llevarán adelante para el abordaje de las situaciones más complejas.
En tanto, el director de Convivencia y Seguridad Ciudadana del Ministerio del Interior, Santiago González, resaltó el trabajo exitoso de la dirección del Instituto y de los funcionarios penitenciarios para aplicar los protocolos de prevención del COVID–19, que hacen que Uruguay sea uno de los dos sistemas penitenciarios en América que no tiene casos positivos.
