La Justicia formalizó a un hombre de 29 años al ser hallado responsable de estar al frente de una boca de venta de drogas que operaba en la zona de Parkway.
De acuerdo a lo informado por Jefatura, contando con elementos probatorios, surgidos de una investigación llevada a cabo por la Brigada Antidrogas Departamental, se interceptó la marcha de un automóvil Ford Falcon que se desplazaba por Baldomero Vidal y avenida Salto. Identificaron al conductor, a una mujer y una niña que viajaba en el asiento trasero. Luego de que descendieran del auto, la Policía efectuó una inspección que permitió hallar –debajo del asiento del conductor–, un envoltorio de nylon con aparente sustancia de color blanco, que fue pesada en el lugar, con un resultado de 29 gramos. En tanto, efectuado el reactivo de campo, dio positivo para posible presencia de “clorhidrato de cocaína”, por lo que se detuvo al conductor y se ocuparon los celulares que llevaban. Asimismo se informó al fiscal de Turno, quien resolvió que el hombre permaneciera detenido.
Continuadas las actuaciones, en la órbita de la Justicia Penal, se dispuso la formalización de la investigación y posterior juicio abreviado de éste por “un delito previsto en el artículo 31 del Decreto Ley 14.294 en la redacción dada por las Leyes Nº 17.016 y 19.172, en la modalidad de tenencia no para consumo de sustancias estupefacientes”, imponiéndole como pena dos años de penitenciaría. Será cumplida de la siguiente manera: doce meses de prisión efectiva y doce meses en régimen de libertad vigilada bajo las condiciones de arresto domiciliario nocturno (de 21 a 6); fijación de domicilio; presentación a la comisaría de su jurisdicción una vez a la semana; someterse a vigilancia de la OSLA; y la prohibición de salir del país, comunicándose a la Dirección Nacional de Migraciones para ser ingresado al sistema de control.
A su vez se dispuso el decomiso del automóvil Ford Falcon, un celular, 650 pesos uruguayos, 200 pesos argentinos y 4 dólares, los que deberán ser depositados en cuenta bajo el rubro de “autos”, quedando todos los efectos a disposición de la Junta Nacional de Drogas. La sustancia estupefaciente incautada deberá ser derivada al Instituto Técnico Forense para su análisis y posterior destrucción.
