El Gobierno dio a conocer anoche la aprobación del protocolo que regula la actividad turística en los parques termales de Salto y Paysandú, que contiene disposiciones correspondientes a la segunda etapa de reactivación, según se titula el documento.
El diputado Nicolás Olivera transmitió de inmediato la confirmación que recibió del propio subsecretario Remo Monzeglio, la que calificó como “una buena e importante noticia para el departamento, que refiere a la habilitación por parte del gobierno en cuanto a los protocolos, de la apertura de los centros termales; no solamente lo que se había dicho del uso del alojamiento y los lugares para comer, sino también de las propias piscinas, o sea, del centro termal en su potencial”.
Al respecto el legislador puntualizó en las particularidades de esta habilitación “en lo que tiene que ver con el 50% del aforo, en cuanto a personas, respetando el distanciamiento, extremando también los cuidados sanitarios. Pero son los trazos gruesos de una decisión que por supuesto a Paysandú le importa y mucho porque es un sector de los más golpeados, porque desde el 13 de marzo han tenido nula actividad, han tenido cero actividad, y la verdad que es entendible la honda preocupación de gente que lamentablemente ya comenzaba a vérselas bastante negras”.
El diputado destacó la importancia de este anuncio que permite pensar en las próximas vacaciones de invierno, “en un país donde tenemos que apostar al turismo interno, para Paysandú en particular y para sus dos centros termales, es una gran noticia”.
A LA ESPERA
La noticia fue recibida con mesura en la Intendencia de Paysandú, en tanto se entiende que la apertura no se dará inmediatamente. Por un lado porque se tienen que instrumentar las medidas que indica el protocolo y por otra parte porque todavía está vigente el decreto que prohibió el 13 de marzo el funcionamiento de las termas.
Alejandro Leites, subdirector de Promoción y Desarrollo, indicó a EL TELEGRAFO que “más allá de aprobarse el protocolo, debe ser revocado el decreto presidencial. Vamos a esperar que se nos oficialice que se haya revocado el decreto”.
El funcionario agregó que además se solicitó “un mínimo de anticipación, para al menos ver qué ajuste tenía el protocolo, que tuvo modificaciones respecto a lo que se envió. Se habló con los operadores que se necesitan por lo menos 3 o 4 días para ajustar las medidas del protocolo”.
La intención es que en el transcurso de la semana el poder ejecutivo procese esa modificación en la normativa y simultáneamente se coordine con los operadores y con la Intendencia de Salto la aplicación de las medidas previstas. Leites aseguró, no obstante, que la intención es que las termas reabran “antes del fin de semana que viene, por el tema de las vacaciones”.
PROTOCOLO
Las disposiciones referidas al distanciamiento físico en el protocolo para la apertura de los centros termales indican, por ejemplo, que “en espacios comunes ubicados al aire libre, se debe respetar la distancia mínima de seguridad entre las personas de 2 metros”. Agrega que el aforo total del parque, “no podrá superar al 50% del que se tenía previamente al COVID-19”.
En cuanto al uso de las piscinas “se deberá mantener una distancia mínima entre los usuarios de grupos familiares. En el caso de piscinas cubiertas, la distancia mínima referida es de 6 metros por persona o grupo familiar, en el caso de las piscinas al aire libre, la distancia mínima es de 4 metros por persona o grupo familiar”.
El documento contiene también medidas especiales y de higiene, y por ejemplo dice que “se considerará la inclusión de barreras físicas, sendas de tránsito diferenciadas, marcas y señales que orienten a trabajadores y público general”.
También “se exigirá la utilización de tapabocas para circular por todas las instalaciones de los parques termales por parte de todos los usuarios, clientes, trabajadores y proveedores, exceptuando las áreas de piscinas y adyacentes”.
El uso de los vestuarios “estará prohibido”. “Cada uno de los usuarios deberá ducharse con jabón antes de ingresar a las piscinas, en las duchas a la intemperie señalizadas para ese fin. Se exigirá que cada uno de los usuarios cuente con jabón de uso personal”, expresa.
Se exhorta además “a la adquisición de entradas de forma anticipada en los casos donde sea posible, así como abonar mediante el uso de medios de pago electrónicos como tarjetas de crédito y/o débito, con el fin de evitar el manejo de dinero en efectivo”.
Por otra parte se prohíbe el uso de elementos recreativos “tales como flotadores, pelotas u otros en una primera etapa están prohibidos”.
CAPACIDAD
Establece el protocolo que, “teniendo en cuenta la extensión del parque termal y su capacidad de carga, cada centro termal deberá determinar su aforo siguiendo la presente normativa en coordinación con las respectivas intendencias y autoridades sanitarias” y al respecto agrega que “en ningún caso el referido aforo podrá superar el de una persona por cada 5 metros cuadrados”. Además, para garantizar la correcta higiene, desinfección y control de las piscinas, así como los protocolos de desinfección, “los parques estarán abiertos al público máximo 6 días a la semana”.
Asimismo indica que “se exhortará a las personas mayores de 65 años y portadores de comorbilidades a no concurrir a los centros”.
