Enmarcada en la convocatoria de la Confederación de Funcionarios del Estado (COFE), la Federación Uruguaya de Magisterio (FUM), la Asociación de Funcionarios de UTU (Afutu) y la Federación Nacional de Profesores de Educación Secundaria (Fenapes) a través de Afempay, se movilizaron en la plaza Constitución, en rechazo al presupuesto que se encuentra en discusión parlamentaria.
“Queremos ingresar en el debate del presupuesto porque vemos el cierre de los procesos parlamentarios y no se logra torcer la lógica del gobierno que define a este presupuesto como de ‘ahorro’, pero que es un recorte puro y duro. Notamos una gran pérdida de los recursos económicos que repercute en pérdidas de horas de clase, programas y propuestas educativas”, dijo a EL TELEGRAFO el dirigente de la Fenapes, Horacio Acuña.
Ejemplificó que “en los cursos de Formación Profesional Básica o FPB podemos entender que merecen una readecuación, pero de ninguna manera implican el cierre de propuestas porque atendieron a una diversidad de estudiantes, que si no fuera por esas iniciativas educativas, estarían fuera del sistema educativo”.
En Educación Secundaria, “vemos una reducción de las horas de aula de Informática, reducción en los cargos de los profesores orientadores bibliográficos en las bibliotecas, en las horas de tutorías o de apoyo a estudiantes y hay recortes en educación coral. Y ha sucedido en los turnos nocturnos, donde nunca nos quedó claro cuál es la postura con respecto a estos planes”.
El dirigente precisó que ese panorama “nos brinda un sentido de precarización que nos preocupa. Estamos en un período de pandemia, recién regresó la obligatoriedad a las clases y hay muchos que discontinuaron sus vínculos con la institución. Será necesario el año que viene poner en consonancia los aprendizajes que no pudieron hacerse este año”.
Explicó que “llegaremos a salones con aglomeración de estudiantes que redunda en una sobrecarga docente y baja el tiempo de dedicación de los estudiantes, además del fomento del multiempleo”. Acuña reconoció que las jornadas de paro de 24 horas, como este miércoles, corresponden a una asistencia “que tiende a la normalidad en la presencia de los profesores, pero el impacto se da en los estudiantes”. La Fenapes aprobó un nuevo paro de 48 horas a efectuarse en la primera quincena de noviembre.
NEGOCIACIÓN COLECTIVA
De acuerdo al dirigente, “el presidente de la ANEP no sostiene un diálogo con la representación de los trabajadores y los docentes se encuentran sin negociación colectiva en los tres órdenes. La impresión que tenemos es que el gobierno quiere deslegitimar la representación de los trabajadores y asumir el diálogo directo, quitando a la representación”.