El trabajo de la Fiscalía de Tercer Turno, que dirige Carlos Motta, permitió esclarecer las causas en que se originó un incendio en una habitación de una pensión, de la zona de Gutiérrez Ruíz y Uruguay, que se cobró la vida de Francisco Lalleves Medeiros, de 36 años. El hecho, que en principio había sido catalogado como un accidente, tuvo un giro inesperado al contarse con elementos que permitieron probar que escondía intencionalidad. El trabajo del equipo de investigación derivó en la detención de un hombre, que rentaba una pieza en la misma pensión, a quien se le comprobó su responsabilidad en originar el foco ígneo.
De acuerdo a la información brindada, en la madrugada del domingo un llamado al 911 informó de un incendio en una pensión. Al lugar acudió Bomberos que se dedicó a extinguir las llamas y rescatar a un hombre con importantes quemaduras. Debido a que no había ambulancias disponibles, pese a que se reiteró que se trataba de un hecho grave, la Policía resolvió trasladarlo a bordo de un patrullero hacia el servicio de urgencias del hospital.
Al diagnosticarse las lesiones, entre ellas el compromiso en las vías respiratorias, se resolvió su traslado al Cenaque pero, en medio del trayecto hacia Montevideo, Lalleves dejó de existir.
En las averiguaciones se supo que la víctima tenía inconvenientes con un vecino, el que incluso ayudó con baldes de agua para apagar el incendio. La tarde anterior, según fuentes confiables a EL TELEGRAFO, P.D.G (carente de antecedentes penales) estaba con “rabia” porque Lalleves le sacó unos alimentos y cuando le reclamó, éste le contestó: “qué me importa”. A las 5 de la mañana, aún molesto, se despertó, prendió un cigarro y con él un nylon que arrimó a una sábana colgada en la puerta de la habitación de Lalleves. El fuego tomó dos colchones que estaban a escasa distancia y rápidamente se propagó por toda la habitación donde su morador descansaba.
La Justicia resolvió la formalización de la investigación y posterior tramitación por juicio abreviado del responsable quien fue condenado “un delito de incendio en concurrencia formal con un delito de homicidio culposo”, imponiéndole una pena de 4 años y 6 meses de prisión efectiva.
