La Unidad de Inspectoría de la Intendencia detectó en las últimas horas la reaparición del intento de estafa a comerciantes, tratando de infundirles temor ante una posible gran multa de la Intendencia, que puede ser evitada si se paga una cifra sensiblemente menor directamente al “inspector”.
El encargado de la Unidad Álvaro Lussich dijo que tomaron conocimiento de “denuncias presentadas a la Policía”. El modus operandi es similar a situaciones anteriores. “Por medio de llamadas telefónicas intiman a comerciantes que supuestamente tienen problemas de bromatología y que para solucionar las fallas era necesario pagar algún dinero para evitar que se labre un acta en la que se consignen las situaciones irregulares”.
Empero todo eso es falso. “Hay que dejar en claro al comerciante de Paysandú -dijo Lussich- que no es el procedimiento que aplica el cuerpo inspectivo, que se trata de un intento de estafa. En la Intendencia de Paysandú los inspectores no pueden cobrar ningún dinero, ni ejecutar ningún proceso de cobro de multas”.
La aplicación de multas “se realiza a través de un proceso administrativo que lleva un tiempo y un procedimiento. Por otra parte siempre se lleva adelante un acto presencial nunca se hace nada por teléfono. Los inspectores fiscalizan en persona, sacan muestras de la parte bromatológica en los comercios que corresponda, pero no les corresponde cobrar infracciones. Aclaramos esto para todos los comercios, que estén alertas ante estos intentos presuntamente delictivos”.
