El déficit hídrico “dejó zonas del país muy castigadas y con grandes mortandades de ganado”

Ingeniero agrónomo Carlos María Uriarte.

El ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca, ingeniero agrónomo Carlos María Uriarte, señaló que el déficit hídrico que ha generado diversos inconvenientes al sector agropecuario, “dejó zonas del país muy castigadas, y en donde se constataron grandes mortandades de ganado”.
El secretario de Estado en diálogo con EL TELEGRAFO, explicó que “a pesar de que en la presente semana tuvimos una regada general porque el agua –sea poca o mucha–, ha llegado a todo el país, no soluciona el problema de fondo que es el déficit hídrico, más en una actividad como la nuestra, en donde los efectos no son inmediatos, y los daños causados a la fecha van a repercutir y son inevitables a nivel de la producción de carne o la merma de rendimientos de algunos cultivos”.
Recorriendo la situación general del país, Uriarte indicó que hay áreas que “han sido muy beneficiadas por las lluvias en los últimos tiempos, como es el departamento de Rivera, gran parte de Artigas y Tacuarembó y algo de Salto. A eso se agregan manchones en Colonia –oeste de ese departamento–, en donde ha llovido muy bien y rayando los excesos. Incluso en Cerro Largo, contra Río Branco, en donde hay excesos de agua y la soja está sufriendo por esas lluvias”, dijo.
Respecto a las zonas más castigadas, mencionó las que han tenido dos secas en menos de un año y que “todavía están lejos de estar recuperadas y en donde el pasto murió”. Para que el pasto vuelva, precisó que “tendrá que hacerlo desde sus raíces”. Se refirió a zonas del sur del país, “sureste, como el propio Cerro Largo”, especificando el ministro en donde tiene su campo, “en el entorno de ruta 7, donde ha habido grandes mortandades de ganado, que a la desnutrición se le sumó ataque de garrapatas, enfermedades infecciosas, porque el animal al andar contra el piso se infecta más”.
Esos lugares graves “han recibido entre 10 y 30 milímetros, extendiéndose también a Flores, algunas zonas de San José, donde todavía el panorama es grave”.

AGRICULTURA

Para el ministro de Ganadería, la agricultura está cerrando un año “para enmarcar”, siempre y cuando se complete una buena zafra de soja, “porque el precio actual cercano a los 500 dólares la tonelada, va a compensar la pérdida de rendimiento que obviamente la seca ha producido en muchos de los cultivos”. Es esperable que el precio “se mantenga, no digo en los 500, pero sí por encima de los 400”, acotó Uriarte
Estas lluvias llegan en un momento crítico para algunos cultivos. “Nos queda tener algo de agua en el llenado de grano, y con eso completaríamos un año agrícola que ni el más optimista hace un año lo hubiera soñado”.
“Ni siquiera el arrocero, porque cuando asumimos en el ministerio, venía de padecer una crisis de muchos años pero cerraba un ejercicio espectacular, porque uno de los efectos de la pandemia, en particular en el mercado del arroz fue muy positivo y pudo hacer cerrar al sector en un buen año, y está a punto de cerrar otro positivo”.
Sobre la soja, entiende que el área será “similar al del año pasado, y quizás un poco superior”. Las lluvias de fines de noviembre “fueron muy oportunas para instalar el cultivo con buena humedad, y la capacidad de siembra en Uruguay es muy alta, por lo que en poco tiempo se puede sembrar mucho”.
Por otra parte, consideró que el maíz de primera ya comenzó con las primeras cosechas, “viendo afectado su rendimiento tanto para silo como para grano, especialmente los de primera”.