(Subrayado)
Sandra Young es una policía de 52 años que desempeña funciones en comisaría 24 del Cerro desde hace muchos años. El martes a última hora de la noche salió del turno y un patrullero la llevó hasta la esquina de la casa, en el barrio Maracaná. Se bajó del vehículo próximo a las 22 y en el trayecto de pocos metros que hacía caminando hasta su vivienda fue víctima de una rapiña. La policía iba uniformada. Él o los autores del ataque le dispararon en la cabeza y le robaron el arma de reglamento.
Un móvil policial trasladó a la víctima hasta el Centro de Salud del Cerro donde recibió los primeros auxilios y desde allí fue derivada en ambulancia escoltada por patrulleros que abrieron camino hasta el Hospital Policial.
La funcionaria policial fue operada y se le extrajo un proyectil calibre 22 de la cabeza, que estaba entre el cuero cabelludo y el hueso según indicaron a Subrayado delegados del gremio policial.
La información primaria indicaba que la mujer había recibido dos impactos de bala en el cráneo, pero el diagnóstico médico al que accedió el Ministerio del Interior indica que fueron tres las heridas de arma de fuego.
La policía permanece en el CTI en estado delicado y se aguarda su evolución.
Se investiga cómo ocurrió el ataque, que fue en una zona muy oscura y donde la poca luminaria que hay no estaba funcionando.
