Economía del agro cayó 0,4 % en 2020

La economía uruguaya se contrajo 5,9% en 2020, en línea con lo que venían proyectando los distintos analistas privados (-5,7%) y las propias autoridades de gobierno (-5,8%). El PBI de Uruguay tuvo así su peor contracción desde la crisis de 2002.
En el último trimestre del año pasado (octubre – diciembre) el PBI mostró ciertas señales de reactivación y creció 1,7% respecto al tercero, aunque cayó 2,9% en la comparación interanual, según el informe de Cuentas Nacionales que divulgó este miércoles el Banco Central de Uruguay (BCU).
“Sobre estos resultados incidió la emergencia sanitaria, afectando la movilidad de las personas y el normal funcionamiento de los establecimientos productivos”, explicó el comunicado del BCU.
Todos los sectores de la economía cayeron en su actividad en 2020 frente a 2019 a excepción de la construcción, que fue el primero en reactivarse tras el parate inicial por medidas para contener la COVID-19 y se vio apuntalado por las obras para la segunda planta de celulosa de UPM, así como otras de infraestructura y de vivienda.
El sector agropecuario cerró el 2020 con una caída del 0,4% respecto a 2019. En cambio, en el trimestre octubre – diciembre, ese sector junto con el de pesca y minería incrementó su valor agregado en 7,8% respecto al cuarto trimestre de 2019, como consecuencia de los aumentos de las actividades agrícola, pecuaria y silvícola. El desempeño favorable de la actividad agrícola se explicó principalmente por la mayor cosecha de cultivos de invierno en la zafra 2019-2020.
En el caso de la actividad silvícola, el crecimiento del valor agregado se debió tanto a la mayor exportación de rolos como a la mayor demanda de las industrias procesadoras de madera. Finalmente, el aumento del valor agregado de la actividad pecuaria se debió a la mayor producción y remisión de leche, y de la ganadería de carne por una mayor extracción de vacunos (tanto para faena como para exportación).