“El año pasado no sabíamos siquiera si íbamos a jugar”

El rugby paralizó su competencia y entrenamientos en conjunto, y espera que a partir del 13 de abril pueda retomar las actividades con normalidad.
Para Trébol, que debutó con victoria en el Torneo Apertura y espera por su debut como local, la situación complica pero se tomó la experiencia del pasado año para que cada jugador entrene individualmente en su casa.
“Nos complica un poco el parate porque veníamos de un mes y medio de preparación, se venía entrenando muy bien y cumpliendo las etapas planificadas, pero el año pasado ya nos pasó esto y lo tenemos como experiencia, así que es un nuevo desafío”, dijo el entrenador del equipo sanducero, Mateo Durán.
El staff técnico envió “a los jugadores la planificación hasta el 12 de abril, con trabajos individuales en casa, tanto de gimnasio como de destrezas técnicas, y vamos a estar así estas dos semanas, cada uno por su lado, con la esperanza de que todo pueda volver a la normalidad”.
Para Durán, “el parar después de un año difícil motivacionalmente complica, pero es un desafío para los entrenadores tratar de mantener esa motivación y que sigan trabajando individualmente”. Eso sí, la gran diferencia con respecto a 2020 es que “el año pasado no sabíamos siquiera si íbamos a jugar, y ahora tenemos una fecha de finalización, el 12 de abril, así que serían dos semanas, y con certezas es un poco más fácil entrenar”.
Mientras se realiza un seguimiento, se observan los videos que envían los jugadores y se los motiva con las charlas planificadas, “lo que estamos trasmitiendo es que al día siguiente del 12 de abril ya arrancamos con rugby para una semana después jugar, aunque no está oficializado”.
Trébol deberá recibir a Champagnat en su reducto.