La empresa Copay, que en sus líneas interdepartamentales estaba transportando entre un 65 y 70 por ciento de la cantidad de pasajeros que viajaban en 2019, desde que se autorizó el aforo completo nuevamente, aun en pandemia, está “a la expectativa de algún tipo de subsidio por el aforo que de nuevo perdemos”, dijo su presidente José Luis Tagliani. “Todavía no tenemos ninguna certeza, pero ciertamente un subsidio es clave para lograr empatar los costos. Obviamente no estamos ganando nada”.
Cuando le fue otorgado un subsidio al transporte de pasajeros “se logró equiparar los costos operativos, porque es evidente que trabajando con el 50% del aforo, se trabaja a pérdida, si no hay un apoyo de un subsidio”, destacó.
Si bien Montevideo está en rojo en el Índice Harvard, la mayor reducción de pasajeros se da en la línea a Tacuarembó y Rivera, otros dos departamentos también en rojo. “Actualmente quienes viajan en esa línea son docentes que trabajan en esos departamentos, estudiantes que concurren a las escuelas agrarias de Tacuarembó o Rivera y de allá estudiantes de Educación Física. Pero otro tipo de pasajeros prácticamente no; obviamente no hay viaje de compras, incluso porque los controles son muy fuertes, con el objetivo de desalentar esos traslados, precisamente”.
Tagliani se mostró muy preocupado porque “en algún momento llegamos a tener una caída del 80% en la venta de pasajes. La situación había mejorado, pero ahora no sabemos qué va a ocurrir”.
Por otra parte “el sector del transporte quedará golpeado -como otros sectores de la economía uruguaya sin dudas- y no sabemos por cuánto tiempo. Claramente no habrá por un tiempo renovación de la flota, que llegamos a hacerlo anualmente por el crecimiento empresarial. Pero eso quedará estancado porque habrá un estancamiento del país; muchos uruguayos no mejorarán rápidamente su situación económica, que estará muy complicada. Entre otras áreas eso tendrá repercusión en el transporte”.
