“El proyecto vial en calle Cerrito es una pésima obra”, aseguró el intendente departamental Nicolás Olivera. Actualmente los trabajos están detenidos porque la actual Administración entendió que “no mejora absolutamente nada, la calzada tiene el mismo ancho –es decir que es muy angosto para los requerimientos actuales– y no se toca el canal de desagüe central, que debió ser centro de una obra transformadora. Por supuesto, había que invertir dinero, pero lo que se planificó es pésimo, en eso coinciden todos los profesionales que han visto y opinado al respecto”, subrayó.
La obra surgió en acuerdo con el Programa de Desarrollo y Gestión Subnacional (PDGS), “pero al final la Intendencia termina poniendo más dinero que ese fondo que surge de un acuerdo con el BID. No tiene ningún sentido un proyecto de estas características porque deja exactamente en las mismas condiciones la calzada, en una zona de la ciudad donde precisamente se necesita ampliar el ancho de calzada para dotar de fluidez al tránsito”, indicó Olivera.
“La gente y los vecinos se van a encontrar con lo mismo que había antes, solo que con un pavimento un poco mejor. Un grave error fue utilizar un fondo PDGS para una obra que realmente es pésima” dijo más adelante, antes de indicar que resulta casi improbable modificar el proyecto “porque es un fondo BID. Habría que renunciar al proyecto e iniciar otro. Entonces vamos a tener que terminarla para no tener que perder el dinero, solamente por eso”.
Lo que debió proyectarse “es reforzar el pluvial central con una loza de tal envergadura que permita el tránsito. Se puede hacer y se hace. Pero con un presupuesto mucho mayor que nosotros tenemos calculados en 70 millones de pesos”. El presupuesto de la obra firmada el 29 de julio de 2020 por el entonces intendente Mario Díaz, es de 17.996.026 pesos.
“Nos dejan algo que tenemos que hacerlo, que está previsto, que está adjudicada a una empresa (Ramón C. Álvarez S.A.). Hemos interrumpido la obra porque vimos que no tenía ningún sentido y en este ínterin estuvimos buscando todos los formatos habidos y por haber para encontrar una solución mejor para el proyecto en sí mismo, para la parte económica y la vía formal y burocrática. Como dije, por ser un formato BID no queda otra posibilidad que terminarla. Aun cuando el proyecto de obra es pésimo”, concluyó el Intendente de Paysandú.
