El ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca, ingeniero agrónomo Carlos María Uriarte manifestó estar convencido que los países de la región “somos parte de la solución, y no del problema. El desafío es producir más y mejor, con menos. Y siempre velando por el cuidado de nuestra gente y nuestros recursos naturales”.
Durante su aporte, en la mesa redonda virtual “Panoramas Alimentarios Futuros: Reimaginando la agricultura en América Latina y el Caribe”, el secretario de Estado presentó una serie de características diferenciales que destaca a nuestro país a nivel regional y mundial: nuestro estatus sanitario, la inocuidad de nuestras carnes y la forma en la que la producimos “nos hacen únicos en el mundo” expresó. Recordó además la trazabilidad bovina y la prohibición del uso de hormonas de crecimiento.
Uriarte dijo también que nuestro país no se destaca en los mercados solamente por la ganadería, sino que el desarrollo forestal y la producción agrícola, fundamentalmente en la exportación de arroz y soja, lo diferencian. Asimismo, subrayó el reciente crecimiento en la producción del Cannabis medicinal.
Destacó también la riqueza en recursos hídricos, tanto superficiales como subterráneos, “y es nuestro compromiso velar por su uso responsable”. Al respecto, el ministro agregó: “Estamos trabajando para fortalecer la utilización del riego como respuesta al cambio climático, así como en el desarrollo de seguros agrícolas de rendimiento”.
Durante la actividad se presentaron los hallazgos de un informe regional y se compartieron diferentes perspectivas por parte de los Ministros de Agricultura de la región. La convocatoria organizada por el Banco Mundial, contó además con la presencia de Carlos Felipe Jaramillo, vicepresidente para América Latina y el Caribe, y de Anna Wellenstein, directora Regional de Desarrollo Sostenible para América Latina y el Caribe. El mandatario uruguayo estuvo acompañado por el Ministro de Agricultura de Guyana, Zulfikar Mustapha, el secretario de Comercio de El Salvador, Miguel Kattán, el ministro de Agricultura del Paraguay, Moisés Santiago Bertoni y el ministro de Agricultura de República Dominicana, Limber Cruz López.
Fundamentación de la actividad
Los sistemas de agricultura y alimentos en América Latina y el Caribe (ALC) son justamente reconocidos entre los más exitosos del planeta: han alimentado a una población de rápido crecimiento, facilitado el desarrollo económico y la urbanización en la región, generado exportaciones sustanciales, y ayudado a disminuir el hambre y la pobreza a nivel global.
Sin embargo, y a pesar de estas contribuciones significativas, la percepción pública de los sistemas agroalimentarios de ALC como dinámicos, productivos y eficientes solamente refleja parte de una realidad compleja. Los logros se han obtenido a costa de impactos en el medioambiente y en la salud de la población de la región.
La agricultura en ALC utiliza más de un tercio del territorio en la región, consume casi tres cuartas partes de los recursos de agua dulce, y genera casi el cincuenta por ciento de los gases de efecto invernadero de la región.
A pesar del superávit en producción de alimentos año tras año, millones de personas en ALC pasan hambre o sufren de malnutrición y enfermedades relacionadas. Si bien la región ha sido exitosa en alimentar a la población global y en la exportación de alimentos al resto del mundo, ha pagado un alto precio en la salud de su población y en el impacto en el medio ambiente.