En la tarde de este jueves tuvo lugar en la localidad de Chapicuy, en el norte de nuestro departamento, el acto de escrituración de 46 viviendas del Movimiento pro Erradicación de la Vivienda Insalubre Rural (Mevir), que habían sido construidas hace 27 años y a las que restaba dar este paso para que los vecinos pasaran a ser formalmente propietarios de su techo.
Estas unidades habitacionales habían sido inauguradas en agosto de 1994 y naturalmente desde entonces restaba completar la parte formal del proceso. En el acto se contó con la participación del presidente de Mevir, Juan Pablo Delgado y el intendente departamental, Nicolás Olivera, junto al alcalde de la localidad, Milton Laurencena.
Precisamente debe señalarse que el proceso para ser propietario de una vivienda de Mevir suele durar entre 20 y 25 años. En este período los participantes contraen derechos y obligaciones que surgen de un contrato firmado con Mevir, con obligaciones que son básicamente ocupar la vivienda, cuidarla y pagar la cuota correspondiente.
En este sencillo acto el presidente del organismo, Juan Carlos Delgado, destacó en su alocución que el beneficiario “participa en el proceso de la obra. Hay varias luchas que deben hacer los participantes, primero para lograr el plan en la localidad, luego para ser seleccionados, después en el trabajo de la obra y para cuidar a los niños, y también en el pago de la vivienda, que es fundamental”.
Observó que ello “lleva una doble responsabilidad, por un lado la del participante que con eso se asegura su casa y por otro lado, la responsabilidad colectiva, porque con ese pago se permite que más participantes puedan acceder a una vivienda y que así sigamos construyendo comunidad”. Mirtha López, representantes de los vecinos, señaló que la acción de Mevir les permitió hacer realidad el sueño de la casa propia, y que “ahora escriturar significa sueño cumplido”.
