Astillero de Indre nuevamente operativo y con trabajos asegurados

El astillero de Indre S.A., sobre la avenida Baldomero Vidal, está nuevamente activo, dado que sus titulares llegaron a un acuerdo para explotarlo en su ramo, desde el mantenimiento a la reparación de embarcaciones, incluyendo barcazas.

Carlos Poggi, principal de la empresa, dijo a EL TELEGRAFO que “el astillero está con una habilitación provisoria, y ya sacamos el Prime Hope, en una maniobra perfecta”.

Detalló que en el varadero “hay una empresa de dos argentinos que empezaron a trabajar acá. Nos conectamos con ellos, ya habían estado trabajando en Carmelo, es gente de Mar del Plata que se vinieron del todo, ya alquilaron casa en Paysandú y empezaron a trabajar”. Hasta ahora, fueron contratados dos operarios sanduceros para trabajar en el astillero.

TRES BARCOS SANDUCEROS

El trabajo está asegurado por varios meses, ya que comenzaron con la puesta a punto del Prime Hope, y “después le va a tocar al (barco) Don Pepe y seguramente a la Renemar, que salió un año antes del Don Pepe, en 2016”, dijo Poggi. Entiende que habrá trabajo ya que “la intención de ellos es buscar otros trabajos además de los barquitos de acá. Hubo interés de un barco argentino, pero estamos complicados por la epidemia, ya que si el dueño quiere venir a fiscalizar el trabajo se le imposibilita porque la frontera está cerrada. Pero iremos viendo paso a paso”.

Además, “ellos ya se conectaron para trabajar también con barcazas, alquilaron las bolsas de aire (airbags) para poder sacar barcazas al costado de la rampa. Tienen mucho entusiasmo, es gente del oficio con muchos años en el tema de reparaciones navales”. Agregó que “del lado uruguayo estuvieron cerca de cuatro años trabajando en Carmelo”, y aclaró que no son quienes estaban trabajando en el desguace reciente, señalando que “es algo que hablamos sobre el Estado, los mismos a los que ANP les dio hace algunos años la plata para estos barcos que tenemos de clavo acá (por los pecios de los viejos pesqueros coreanos que están varados en el astillero), a la misma gente el Estado les dio para que piquen los de Carmelo, que todavía no lo han hecho”.

PROBLEMAS DE MANTENIMIENTO DEL RÍO

En lo que respecta al varadero sanducero, dijo que “funcionó muy bien, la maniobra se hizo en cuanto el río subió, porque no había agua para acercarlo y se demoró porque no llegabamos al nivel necesario del agua. También tuvimos problema por un caño de OSE que se rompió y ahora lo están reparando, es el caño que pasa por la servidumbre de paso (junto al astillero) y ellos tiran el agua del lavado de las piletas. Están trabajando para que el agua salga más adentro del río, porque el barro que ellos tiran viene para nuestro lado y nos complicó mucho, hemos gastado mucha plata con los buzos y tratando de limpiar con mangueras de agua, abajo del agua, para ir sacando ese barro”, que son los restos de carbón activado y otros productos que limpian los filtros y decantadores de la planta potabilizadora, “y todo eso va para ahí. Y cuando trajeron estos barcos pesqueros, todo eso se rompió, y durante todos estos años ese barro negro vino hacia la rampa que usamos nosotros para sacar los barcos”, afirmó el empresario.

Los trabajos en el barco “ya empezaron, y en unos 30 o 45 días esperamos que esté de vuelta en el agua”. Detalló que el Prime Hope tiene 44 metros de eslora (largo) por 10,20 de manga (ancho), con un peso de poco más de 200 toneladas, “uno de los mas grandes que anda por el río”.

DEBIERON REPONER EQUIPOS

Si bien esta semana se concretó el primer trabajo directo en un barco, “en el astillero se viene trabajando desde hace unos tres meses, poniendo todo en condiciones. Porque con el tema de los pesqueros coreanos, nos destruyeron todo el sistema de maromas, que estaban por arriba de los pesqueros, fue un desastre. Todo el sistema eléctrico fue robado, parecía bombardeado, fue un daño muy grande. Pero de a poco se está rehaciendo, se pusieron a funcionar los guinches, la gente acondicionó casi todo”.

En cuanto a la situación del astillero, dijo que “va a seguir en nuestro poder, y a cada barco que venga ellos cotizarán el costo metalúrgico, en lo que no tenemos nada que ver, y nosotros veremos conjuntamente con ellos el tema de las maniobras, pero nada más. Lo que queremos evitar es perder la llave del astillero, como ya nos pasó de alquilar todo, y después pasamos tres años en el juzgado para sacarlos, y mientras tanto no se puede usar nada, y con el costo que costó recuperarlo”.