El olor a cloro es intenso. Las paredes del pasillo que va a los vestuarios, éstos y la zona de calentamiento, lucen descascaradas.
Mientras, unas cuantas mujeres vestidas de chaleco anaranjado buscan su lugar para almorzar en la zona del palco del Estadio Artigas, para luego continuar la tarea.
Son algunas de las beneficiadas con los jornales solidarios que trabajan en la limpieza del máximo escenario futbolístico del departamento, que no luce de la mejor manera.
Por lo pronto, la idea es comenzar a trabajar en el Estadio Artigas con la intención de lavarle la cara, apuntando a obras de mayor porte que están proyectadas, pero que no se desarrollarán en breve.
Los primeros pasos a dar son la limpieza, la recuperación de los vestuarios, los pasillos y el hall de ingreso. La idea es dejar los dos vestuarios principales y el de los árbitros, en principio, en óptimas condiciones.
¿Por qué no se dejarán listos el resto de los vestuarios? Por la sencilla razón de que se llueven, dado que las filtraciones de la Tribuna Oeste son enormes.
Después se apuntará a las tribunas. Mientras la Este está pintada y luce los asientos blancos, las de las cabeceras serán el próximo objetivo.
Y se espera la próxima semana poder comenzar a trabajar en el recambio de las muchas losetas que faltan o están quebradas, para luego continuar con el pintado de las mismas.
Después, será tiempo de encarar el resto. Por lo pronto, las deas son muchas, están en carpeta una serie de reformas, pero se quiere comenzar a dar pasos firmes, y, sobre todo, seguros, para evitar promesas que no se puedan cumplir.
Las ideas son varias e interesantes, pero lo primero que se pretende es comenzar a cambiarle la cara al Estadio Artigas, por lo que también se apuntaría a la fachada.
