El intendente Nicolás Olivera, en un lenguaje sin expresiones concluyentes –pese a las repreguntas que se le realizaron– confirmó que “vamos a avanzar en un masterplan (antes conocido como Plan Maestro de la Costa) de las alrededor de 350 hectáreas que tiene la costa desde el Sacra hasta el puente internacional” que será realizado por “una empresa número uno a nivel mundial”.
Sin dar detalles que permitan identificar a los diseñadores del masterplan, solo agregó que “estamos hablando de gente que es número uno del mundo, gente que ha pensado en la resiliencia en Holanda, en lugares que tienen problemas quizás más complejos que los nuestros”.
De acuerdo con el intendente de Paysandú, esa empresa de exclusivo primer nivel “nos va a permitir una proyección de calidad pero también pondrá a Paysandú en el mapa nacional e internacional como posible atracción para lo que se va a venir”.
“Ese masterplan va a tener distintos niveles de escala, distintos requerimientos que le estamos pidiendo a este estudio”, dijo Olivera evitando entrar en detalles. “Distrito Park puede ser una de las cosas a incorporar. Por ahora esa es la única respuesta que tenemos. Porque lo que tenemos que hacer es utilizar los recursos de la mejor forma, en proyectos que eleven de categoría la zona, generen inversiones, trabajo y cambios fundamentales en la zona costera sanducera. Lo que queremos es reperfilar al departamento para lo que se viene”.
Para esos cambios subrayó que también se debe partir de un cambio de mentalidad en la comunidad sanducera. “Es necesario, imprescindible, sacarnos el chip de seguir llorando con lo que fuimos y por qué no volvemos a ser lo que fuimos. Hay que dar vuelta esa página y empezar a construir lo que Paysandú se merece, para tener otro perfil, que le permita a nuestros hijos, a nuestros nietos, seguir estando acá”.
“Eso va de la mano con muchas ideas. Distrito Park es una muy valiosa, pero este estudio nos va a ayudar a terminar de definir qué va en cada lugar. Porque un masterplan implica reordenar el territorio, fijar funcionalidades a la tierra, determinar qué se puede hacer y qué es lo mejor para hacer en cada lugar. Todo con un criterio que creemos que hoy es insoslayable: el de sostenibilidad y sustentabilidad”, aseguró más adelante.
Resaltó especialmente “la sustentabilidad ambiental. Antes quizás la meta era ganarle al agua metros de tierra. Hoy ese paradigma está en discusión. Hoy la ciudad tiene que interactuar con lo que es algo inevitable, la recurrencia de las inundaciones y del agua y el río”. Y reafirmó que “la sustentabilidad ambiental es fundamental para cualquier cosa que pensemos como proyecto viable de ahora y para cincuenta años en adelante”.
No hizo referencia alguna al Plan Paysandú, decreto 7.719 de ordenamiento territorial, ni al mapa de riesgo de inundación de la ciudad incorporado, que tuvo en cuenta el comportamiento del río Uruguay y cómo se compone la planicie de la inundación. Tampoco hizo mención a la situación de playa Mayea, donde se ha instalado un asentamiento con emprendimientos de ladrilleros que obviamente tienen un impacto negativo en la tierra del lugar.
