Congreso y MGAP definieron apoyos por emergencia agropecuaria

Olivera se reunió con autoridades del MGAP, en el marco de la mesa del Congreso de Intendentes.

La mesa del Congreso Nacional de Intendentes, presidida por el floridense Guillermo López, recibió ayer al ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca, Fernando Mattos, y al subsecretario, Ignacio Buffa, con el fin de coordinar acciones y transferir fondos, luego de la definición de las seccionales bajo emergencia agropecuaria.

Asistió el intendente Nicolás Olivera, en tanto la declaratoria abarca a las seccionales 9ª, 10ª y 11ª de Guichón y Tambores.

“Se nos dio el diagnóstico sobre el decreto de emergencia hoy, porque el 5 de enero –en la próxima reunión de la Comisión de Emergencia Agropecuaria– la foto va a cambiar por la actualización de la información y dan como un hecho que habrá más áreas afectadas”, dijo Olivera a EL TELEGRAFO.
Definieron dos aspectos, donde “uno es territorial, porque hablamos de cinco departamentos afectados con 19 seccionales. El otro establece los apoyos a los rubros ganadería, lechería y apicultura”.

Las autoridades ministeriales acordaron con los intendentes, de acuerdo a lo establecido en la última emergencia sanitaria a finales de 2020, “una partida fija y una partida variable por departamento, en función de las unidades productivas afectadas. La población objetivo son los pequeños productores familiares registrados en el ministerio y otros con emprendimientos menores a 500 hectáreas”.

Olivera informó que “la primera medida será duplicar lo aportado la vez anterior por concepto de partida fija y en la partida variable subirá el universo de beneficiarios. Los gobiernos departamentales aportarán lo mismo que ponga el ministerio, duplicando la asistencia del gobierno”.

En la emergencia establecida hace un año recordó que “se dieron préstamos a través del Banco República por más de 100 millones de pesos a más de 80 productores, con tasa negativa. Es decir, por debajo de la inflación. Ahora se abre nuevamente esa puerta por el ministerio y el BROU. En este caso, salvo una pequeña parte que el ministerio pide devolver por ley, todo lo demás no será reembolsable”.

La segunda medida adoptada a finales del 2020, “eran recursos que el ministerio destinaba a las intendencias con destino a limpieza de tajamares por casi un millón de pesos. La idea ahora es duplicar ese aporte y que la Intendencia ponga una cantidad similar”.
Sin embargo, explicó que “habrá una diferencia con la emergencia pasada, porque esos recursos se dispusieron en forma exclusiva a mejora de las aguadas. Ahora estará abierto fundamentalmente a la compra de alimento para el ganado”. Asimismo, las autoridades “ofrecieron el apoyo técnico del INIA y el ministerio, además de realizar gestiones ante el BPS para lograr el corrimiento de los vencimientos. Pero están en conversaciones”.

El intendente destacó que durante el encuentro con los jerarcas ministeriales coincidieron en “la necesidad de generar mecanismos ágiles. Por eso, las intendencias nos ofrecimos a ponerlos en acción rápidamente en enero. La idea es que la semana que viene se reúnan todos los directores de Desarrollo de las intendencias con el ministerio para definir las bases de los llamados”.

En la emergencia anterior, el ministerio “ponía como condición que los productores familiares estuvieran al día con los tributos, de acuerdo al Fondo de Emergencia Agropecuaria (FAE). Ahora, como las intendencias vamos a poner plata, la idea es cubrir a aquellos que tienen problemas y en esta ocasión va a ser más laxo”.

Animales sueltos

En el marco del encuentro con los referentes ministeriales, “volvía a hablar con Mattos y Buffa sobre la problemática de los animales sueltos. Hay una serie de gestiones realizadas, entre las cuales se encuentra una corrección al decreto reglamentario que, por esa razón, deberá volver a firmarse por todos los ministros. También me comuniqué con el director general de Servicios Ganaderos, Diego De Freitas, que me confirmó que están a la espera del decreto para comenzar a ejecutar acciones. Una vez que sea firmado, podemos dar una mano con las retenciones de los animales. Pero necesitamos ese respaldo para la captura y definir si un animal va a faena o para donación”.