Un patio de comidas con una amplia variedad de propuestas gastronómicas pueden disfrutar quienes se acerquen al predio ferial, con platos para todos los gustos y bolsillos, que incluyen los típicos nuestros, pero también venezolanos, rusos y hasta turcos. También hay una gran diversidad de ofertas para celíacos.
Los puestos están instalados a pocos metros del ingreso al predio ferial, disponiendo los comensales de mesas y sillas para disfrutar del lugar al aire libre, tanto durante un paseo vespertino como nocturno, en familia o con amigos.
Al ingresar nos encontramos con un carrito de helados artesanales y cafetería, donde se pueden degustar helados de un sabor a $ 95, dos sabores $ 145 o 3 sabores $ 195, milkshakes con crema y salsa $ 135, así como capuccino y submarino (chocolate caliente) a $ 125, café corto, largo o con leche a $ 100, además de pastafrolas y budines.
Unos metros más adelante, hay un puesto de feriantes provenientes de Salinas con una propuesta de bocatas. Este sandwich va con un pancito de masa madre tibio con queso derretido en una de las caras, pudiendo el comensal elegir entre pastrami, bondiola, lomito o la opción vegetariana que es un bife de zucchini, condimentado con todas las salsas clásicas y el agregado de verduras, presentado con boniatos fritos o papas noisette. Esta opción con esa guarnición tiene un costo de $ 300. También ofrece boniatos fritos solo por un lado, arrolladitos primavera y papas noisette solas o con cherry, a $ 200 la bandeja.
La gastronomía venezolana también está presente en este patio de comidas, con opciones para quienes gustan de la carne, como para vegetarianos, veganos y celíacos. Allí encontrarán las tradicionales arepas de carne, de pollo, de cerdo, de verduras, a $ 250 o los pequeños –palitos de queso envueltos en tiras de masa– a $ 220 la porción de 5. Pensada para la población celíaca, se ofrece la burguerarepa a $ 350. A la vez, está la comboarepa que es la combinación de arepas con papas noisette o aros de cebollas a un costo de $ 350.