
Litoral se consagró campeón del Honor del fútbol sanducero de Primera División al vencer en la gran final por penales, 5 a 4, a Estudiantil, luego de que por cuarta vez en el año igualaran en tiempo reglamentario, ahora 1 a 1.
Estudiantil dominó en el primer tramo de espera, búsqueda y estudio, intentando encontrar los espacios, pero Litoral comenzó a equilibrar las acciones cuando a los 11’ Branca definió afuera, y luego Guiyama tuvo la suya pero envió lejos y arriba.
Dos chances de Schneider volvieron a encender al estudioso, que desnudaba errores defensivos decanos, pero sin concretar. A los 18’ gran jugada colectiva estudiosa que partió desde un pase de Soria encontró a Schneider en solitario que colocó la pelota contra el palo y nada que hacer para De León, era el 1 a 0 para Estudiantil.
Litoral no lograba conectar sus líneas y no tenía claridad. El mediocampo era dominado por Agüero y Ferro, y desde allí comenzaba el trabajo defensivo del equipo de Esquibel.
Ya en la segunda mitad una pelota filtrada de Prino que desaprovechó Soria encendió las alarmas en el decano.
Estudiantil mantenía su juego en bloque, Litoral buscaba a Guiyama con pelotas profundas, hasta que los cambios de Silvera le dieron otro ritmo al equipo y Juncal comenzó a lastimar por la derecha. Y Peralta, atrás, le dio una salida más limpia al equipo, que comenzó a dominar. Un penal bien pitado le dio a Litoral la chance, pero Brum le atajó a Cuelho.
A esta altura el cambio en el dominio era notorio, y a los 22’ una triangulación entre Branca, Pereira y Juncal, que no dudó y marcó la igualdad.
Luego fue más ganas que fútbol y la definición se fue a los penales. Desde los 12 pasos Litoral fue más efectivo, convirtiendo los cinco ejecutados, el último del que se encargó de gran forma Ayrton De León desató la locura decana después de 20 años. Todo se tiñó de rojo y negro, el decano gritó campeón.