“Es lindo saber que vamos por el buen camino”, dicen titulares de cabaña Santa María de Arapey

Parte de la familia y colaboradores, celebrando los premios de la última Nacional Hereford.

Para cualquier cabañero y criador no debe haber nada más lindo que volver a su establecimiento, y después de dos o tres días de una jornada muy especial, con grandes campeones en uno de los ruedos más importantes del país, contemplar esos ejemplares que los siguen desde su nacimiento y ver que se va por el camino correcto en la raza. Esto le sucedió a la familia Burjel Parietti de Santa María de Arapey, tras obtener el Lote Campeón, Copa de Honor y el Tercer Mejor Macho de la Nacional Hereford realizada en Soriano.
Alejandra Parietti Henderson manifestó a EL TELEGRAFO que “la raza nos gusta mucho, y siempre buscamos mejorar sobre todo en datos o valores, donde nos gustaría que sean distintas, o corrigiéndolas. Y desde el vamos, cuando elegimos la madre y que padre ponerle, tratando de que cuando llegue el ternero sea lo que realmente queremos, lo que depende mucho de la genética”.
Sobre el Lote Campeón de la muestra realizada en el local Bequeló, a escasos kilómetros de la ciudad de Mercedes, dijo que “son unos terneros que se criaron desde chiquitos, nacidos en el mes de agosto de 2020, y siempre los estuvimos mirando, incluso una de mis nietas decía cuando los vio en la pista: “este es el que me pisó de chiquito”, demostrando que además de estar siempre arriba de la genética que se produce, es un trabajo que se disfruta en familia”.
Recordó que el año pasado fueron llevados de terneros a las exposiciones de Salto y Paysandú, y llegaron muy bien a esta Expo Nacional, “muy parejos entre ellos, lo que en un lote importa y mucho”, considerando que fue una muestra muy linda, con varios lotes buenos y salieron primeros y después campeones, lo que fue una gran alegría, que siguió luego con la distinción del Copa y el tercero”.
La selección
Lo primero para el trabajo que realiza Santa María de Arapey es “en la parte fenotípica, mirarlo, pero sabiendo que está respaldado por buenos números, porque ya sabemos los valores que tiene su padre y su madre, por lo que esto último ya lo damos por descontado al principio, cuando no tenemos los verdaderos datos”, dijo Alejandra.
Fenotípicamente “los miramos mucho, que sean lindos, que tengan pigmento que es muy importante, que tengan buenas patas, sean abiertos de atrás, que sean largos, que tengan buenos aplomos y res carnicera. Si son hembras es muy importante que sean femeninas, livianitas de adelante”. Y aclaró que lo fenotípico “lo miramos para elegir luego toros de campo, que para nosotros es lo más importante”.
Se acordó de la parte climática, indicando que “en esta zona del departamento de Artigas en donde se ubica la cabaña, la seca estuvo espantosa este año, y hasta fines de febrero la situación fue muy mala y no había nada de pasto”. Recién comenzó a llover a fines del segundo mes del año, y en marzo se comenzaron a aprontar los verdeos, y la torada para la zafra ya está en las avenas y se los ve muy lindos y la suficiente preparación para salir a la venta en el mes de octubre”.
Sobre el Lote Campeón definió que “dos de esos toros se comenzarán a preparar para ir al Prado, pero también hay otros lotes que asistirán a las exposiciones de Salto, Artigas y Paysandú”.
En cuanto a la venta de sus reproductores, indicó que además de la venta en la estancia se suma la participación en los remates de Ñu Porá en Paysandú y de cabaña Macedo en Artigas.
Respecto a la selección de vientres para el establecimiento, Parietti Henderson señaló que “buscamos madres que sean de buen color, de pigmento, de muy buenas ubres, siempre con los datos, que sean largas y con buenos esqueletos, que se desplacen correctamente y tengan femineidad, siendo livianas de adelante”.
La familia
José “Pepe” Burjel y Alejandra Parietti tienen 4 hijos y 9 nietos, siendo una constante en las exposiciones y remates, ver a la familia unida en torno al Hereford y también los Criollos.
“Para mí es lo más importante”, sostiene Alejandra. “Es una bendición poder tenerlos a todos alrededor, y aunque no todos están diariamente en la estancia, acá venimos mucho los domingos, nos juntamos y ya saben que es una obligación después del almuerzo, irnos a la cabaña, en donde la `máma´ les muestra a cada uno y todos opinan. Ese momento de estar todos juntos y disfrutar todos de lo mismo es muy lindo”.
Recordó que cuando hay una exposición o evento “cada uno arregla sus cosas para acompañar”, reconociendo que “‘Pepe’ está siempre y me acompaña, siendo un gusto la unión familiar”.
Con una sonrisa, agrega que “cuando a los nietos los llevo al campo a ver a los terneros que nacen y están al pie de la madre, los miran y me dicen los más chiquitos: `máma´este tiene pimiento, porque saben la importancia que le damos a ese tema en el Hereford de la cabaña, mientras lo miran de un lado y esperan para dar vuelta el ternero y mirarle el otro ojo”.