La pobreza no surgió de la nada ni tampoco fue inventada, precisa de un estado de conciencia activa para ser detectada y debe sentirse para que adquiera forma real. Podríamos decir que la pobreza es un estado de situación que alcanza una extensión casi que inimaginable y que va desde ser ignorada en si misma hasta la ceguera de no verla. Podríamos decir que es falta de…
Podríamos también decir que la pobreza es humana, pues alcanza lo material y lo espiritual y sus variantes modifican la vida y el destino de los hombres, además de necesitar de ellos para existir.
Fuera del razonamiento, sensibilidad, las emociones y los sentidos no hay pobreza.
Los distintos grados de percepción le adjudicarán el tamaño y/o importancia, así como su distribución, incidencia, efectos y tantos otros.
O sea que, además de las infinitas clases de pobrezas tangibles y cuantificables, para imaginar su real tamaño debemos multiplicar de acuerdo al grado de sensibilidad, conocimiento, etcétera, de cada ser vivo que esté interesado en entenderla o hacer algo con ella, para llegar a vislumbrar un número de pobrezas definibles. (abrumador)
La pobreza también ha servido para ayudar a ver el mundo más desmenuzado y por ende más grande, a modo de una herramienta de inspección, de clasificación, de medida de esperanzas y desasosiegos, de realidades y ficción.
De la misma forma sirve para descubrir y conocer el pequeño mundo interior que existe en cada ser, revelando características tan dispares como la piedad y el odio, la honra y la falsedad.
Pero su existencia tangible se revela en la forma con que el hombre maneja conscientemente los atributos insertados en su personalidad, sean buenos o malos, debiendo para reconocerla pasar de un estado latente a un estado concreto perceptible como son, la falta de alimento, la falta de abrigo, la falta de salud, la falta de dignidad, la falta del perdón, la falta de paz. Todas las carencias que lleva el hombre generan pobrezas. Y donde el hombre esté o adonde él se dirija estará siempre la pobreza presente.
¿Por qué esta aseveración de fatalidad?
A mi entender está directamente relacionada a las fallas o espacios vacíos que carga el hombre en su constitución, siendo la propia pobreza causa y efecto de sí misma. El hombre con sus características de gregario ha ido formando núcleos, luego conglomerados y finalmente sociedades.
El territorio que llamamos Uruguay, a pesar de sus bellezas naturales, sus riquezas naturales, no escapó de la ocupación del hombre y por consecuencia de las pobrezas que éstos trajeron restándole belleza, riquezas, dignidad y fértil futuro.
¿Entonces siempre estaremos destinados al fracaso?
No, todo depende del grado de asimetría entre lo bueno y lo malo, lo constructivo y lo destructivo, lo imaginario y lo real, lo deseable y lo factible. El objeto que está inmóvil siempre se moverá si la potencia del motor es mayor que la del freno. Si quitamos buena parte de los factores que frenan, volverá el movimiento.
Ahora retornando al título de este escrito, la pobreza no viene solamente porque el destino decía que tendría que venir.
La pobreza como toda cosa que es del hombre se construye. Y el hombre tiene todo el potencial para hacer crecer la pobreza, mantenerla y/o disminuirla. En otras palabras, la puede manipular.
Así como el individuo lo hace, las sociedades también, solo que el anclaje y los resultados son bien diferentes. Los factores y los tiempos adoptan formas de complejidad muy variados tornando las soluciones cada vez más engorrosas y cada vez más es necesaria la lucidez del hombre para saber elegir los métodos y caminos para evitarla y disminuirla según el momento.
Pero no alcanza con ser lúcido, también tiene que ser creativo, también tiene que ser honesto para sí y para los demás, también tiene que ser justo, también tiene que tener ambiciones, también tiene que tener sueños, también tiene que tener independencia de pasiones, también tiene que tener paz. (tiene que tener muchísimos otros también) A mi entender, la más difícil de las condiciones para una pobreza no ser significativa es tener lucidez social.
¿Qué sería la lucidez social?
Es un atributo o espacio sano en el seno de las sociedades que permite que existan y se ejerzan muchas acciones positivas tales como respeto por la equidad, vergüenza para no escapar de su propio juzgamiento, autocrítica para depurarse permanentemente, espiritualidad para entender las deficiencias de los incompletos y mucha voluntad de hacer lo mejor aunque la idea haya sido propuesta por otro. Es un estado de simbiosis entre el alma y la conciencia que llaman al razonamiento para que las acompañe.
Volviendo al país, el primer gran paso para el inicio, afincamiento, expansión y consolidación de la pobreza lo dio la temprana estatización de todo lo que fuera significativo. (Ya 100 años) El desembarque del hombre moderno ateo socialista/comunista además de traer una propuesta foránea fatídica, daba a sí mismo la oportunidad de abrir y lucir todas sus pobrezas interiores sin restricciones y con la seguridad y soberbia del ignorante. Luego de instalada la gran Máquina de Votos, el consecuente agrandamiento del poder político y sus ramificaciones fueron completando el cuadro técnico del descalabro que haría crecer la pobreza por doquier. Producto de la falta de creatividad para superar la incapacidad de hacer andar la economía, fue la creación del injusto y burro Impuesto al Patrimonio Rural que sería el gran impulsor del Éxodo Rural y posterior inicio del inevitable éxodo uruguayo al exterior. (país expulsor).
Como si no bastase, también vino la insana, negativa y vergonzosa Ley de Inamovilidad del Empleo Público.
Un cuadro desolador nunca interrumpido hasta el presente, donde el crecimiento de la pobreza siempre está presente y luchando cuerpo a cuerpo con la ignorancia para frenar cualquier intento real de generación de riquezas.
Ahora bien, si han pasado tantos años con ese modelo, sugiere pensar que alguien está ganando con la pobreza y no tiene interés en cambiarlo.
¿Será que la pobreza sirve para ganar poder de mando en la sociedad?
Al final tenemos que aceptar la idea de que si un sistema que no consigue disminuir ni menos terminarla pobreza permanece vivo por tantos años, la lectura es que todos estamos cómodos con ese status de mediocridad. Por eso creo que la pobreza se crea por vía de los hombres sin luces, por los hombres malos y por los hombres eclécticos. Los malos manipulando a los carentes es una fórmula de parasitismo despiadado, digno de herejes. ¿Pero será esto para siempre? ¿Seguirán condenando a las futuras generaciones?
¿Seguirán desconsiderando el terruño como base de la soberanía nacional?
Pienso que sí y que no. El día que la mitad de los uruguayos que son los que luchan para mantener el país andando dejen de ser contemplativos, cabizbajos y de hablar pausado e inaudible, posiblemente se pueda ver una luz al final del túnel. Sólo basta tener carácter y decisión para patear los grandes generadores de pobreza. (el sistema como un todo).
Solo una cosita para terminar. No se ilusionen con algunos buenos indicadores de la economía que aparecen en el momento y por momentos. Mientras continúe el sistema estatista comunista/socialista, seguirá el palo en la rueda. La pobreza no viene por sí sola, se construye día a día. Rodolfo Angel Beccaría Pesce
