La Intendencia de Paysandú, el Instituto Nacional de Bienestar Animal (INBA) y el Centro Médico Veterinario firmarán hoy a las 11 en el Salón Rojo, el acuerdo para llevar adelante un proyecto de control de la población canina, que abarcará “la educación masiva, la identificación de los animales vinculándolo a su tenedor o propietario y la castración de machos y hembras, con participación de estudiantes de la Facultad de Veterinaria de la Universidad de la República”, establece el acuerdo.
“Hacemos énfasis en los dos primeros puntos, con educación y tenencia responsable para hacer conocer la ley desde niños. Por ejemplo, a través de la Dirección de Cultura se presentarán sketchs y saldremos a las escuelas y los centros CAIF. Con este acuerdo, comenzaremos con algunos integrantes del Centro Médico Veterinario y el 4 de octubre haremos una gran actividad de impacto, difusión y castración”, dijo la directora de Promoción Social, Guadalupe Caballero.
Asimismo, a las 8 se reunirá en la citada dirección con la oenegé Amigos de los Animales “para ultimar detalles del convenio que se encuentra en su poder desde hace un mes para realizar otro programa de castraciones en la ciudad e Interior del departamento. Es importante destacar que, para ambos convenios, los recursos están depositados por el INBA desde noviembre del año pasado. Así que, una vez que se firmen los acuerdos, se sale al territorio”, señaló a EL TELEGRAFO.
Caballero destacó que “es muy importante la voluntad y responsabilidad de los dueños de los animales para acatar, porque ahora es ley. Además, ya veníamos haciendo un trabajo en conjunto con el Centro Médico Veterinario por el censo canino, que ya finalizó una etapa y falta la parte del centro de la ciudad. Cuando se retome, continuarán con la capacitación a beneficiarios de los programas Accesos y Jornales Solidarios”.
Derribar los mitos
Carmela Do Santos, integrante de la citada entidad que firmará con la Intendencia, subrayó que “si no se educa sobre la tenencia responsable y que la castración no tiene efectos adversos, no hará un resultado a largo plazo en la comunidad. En el comportamiento de la comunidad vemos que algunos castran las hembras, otros esperan que tengan una cría y la mayoría no castran los machos. Hay que derribar los mitos e informar a la población que si no hay control, cada vez habrá más maltrato animal que, en definitiva, no es lo deseable”.
Explicó que “la idea es generar un espacio en el Centro Médico Veterinario para que hagan un apoyo a la comunidad y se involucren en la educación a la población. El único requerimiento es que las castraciones se hagan en un quirófano, con las condiciones de higiene y ambiente climatizado. Porque las castraciones son una técnica quirúrgica de rutina en la medicina veterinaria. No tiene mayores complicaciones, pero requiere de una anestesia general, tal como ocurre con las personas”.
En las cirugías y en la educación de la población participarán integrantes de la subcomisión de pequeños animales del Centro Médico Veterinario.
