La Organización de las Naciones Unidas (ONU) conmemora el Día Mundial del Hábitat cada primer lunes de octubre y este año se desarrolla bajo el lema “Cerrando la brecha. No dejar a nadie ni a ningún lugar atrás”. El organismo internacional expone durante la jornada, el derecho básico a una vivienda adecuada y el desafío que significa enfrentar los contextos de pobreza y desi gualdad en las áreas urbanas.
Las organizaciones populares, por su parte, se nuclean en el Día de los Sin Techo y demandan a las autoridades gubernamentales sobre las reivindicaciones correspondientes a la vivienda. Este lunes, la Federación Uruguaya de Cooperativas de Vivienda por Ayuda Mutua (Fucvam) y la Federación de Cooperativas por Ahorro Previo (Fecovi) se concentrarán a las 18.30 en la plaza Libertad de Montevideo, para marchar con las “casas de cartón” hasta el Palacio Legislativo y cerrarán con un acto en la plaza 1º de Mayo con la lectura de una proclama.
Año de discusión
El presidente de Fucvam, Enrique Cal, resumió que la Rendición de Cuentas tuvo “sinsabores” para los cooperativistas y el sistema nacional de viviendas con la discusión del artículo 304, cuya redacción “no prosperó”.
“La discusión de ese artículo dejaba la puerta abierta al sistema cooperativo que firmó antes de diciembre de 2017 a que perdieran el subsidio a la permanencia. Luego de las mlovilizaciones, eso quedó sin efecto y seguimos gozando de ese derecho que fue una conquista del movimiento cooperativo”.
Sin embargo, la federación manifestó su preocupación porque “no hay un peso más para vivienda en un país donde hay un déficit aproximado a 80.000 viviendas, con una población de un poco más de tres millones de habitantes. Y eso en cuanto al déficit cuantitativo. Porque si se agrega el cualitativo, se suman unas 300.000 familias que viven en condiciones inaceptables”. Explicó que “hay una merma de 40 millones de dólares y si se suman las exoneraciones a los distintos programas de vivienda y a los que ingresan en el fideicomiso, con una equiparación de los beneficios, hablamos de más de cien millones de dólares que pueden adjudicarse a la vivienda”.
La federación augura un “panorama complejo en los años siguientes, cuando se ponga en marcha ese fideicomiso y la construcción de viviendas de interés social estará muy comprometida”. Consultado sobre el diálogo con las autoridades ministeriales, señaló que “hay un contacto fluido y hemos encontrado eco en muchos planteos, pero cuando hablamos de presupuesto, hablamos de otro resorte del Estado que no solo atañe a la cartera de vivienda y tiene que ver con las políticas sociales”.
Cartera de tierras
El integrante de la dirección nacional, Wiliam Guerro, agregó que “en el ministerio ya no hay dinero para las nuevas cooperativas que esperan por la escrituración y los préstamos para empezar a construir. Por eso, pensamos que es necesario el fortalecimiento del Fondo Nacional de Vivienda y una cartera de tierras”, establecido en la Ley Nacional de Vivienda de 1968.
En 2008, con la promulgación de la Ley 18.362, se crea la “Cartera de Inmuebles para Viviendas de Interés Social”, bajo la égida del Ministerio de Vivienda. Sin embargo, “solo los departamentos de Montevideo, Canelones, San José, Soriano, Salto y Paysandú cuentan con una cartera de tierras. Es así que, de acuerdo a las proyecciones de la federación con el presupuesto de 2020-2024, el déficit habitacional en Uruguay puede llegar a 87.000 viviendas al finalizar el quinquenio”.
La secretaria general de la Mesa Departamental de Fucvam, Jaciara Cabrera, dijo a EL TELEGRAFO que aguardan “una reunión con el intendente Nicolás Olivera para reactivar esa cartera de tierras departamental porque dentro de la ciudad hay terrenos con servicios”.