El desfile inaugural del Carnaval sanducero, realizado el pasado domingo en la zona costera, fue el undécimo año para la comparsa Velosamba, que esta vez contó con la participación de 240 personas entre niños, jóvenes, adultos y adultos mayores de diferentes barrios. El regreso a las calles se dio por pedido expreso del intendente Nicolás Olivera de manera especial “de que toda la población y las franjas etarias estuvieran presentes”, dijo la directora de Promoción Social, Guadalupe Caballero, a EL TELEGRAFO.
“Siempre es importante el trabajo en todas las áreas y para nosotros, la Intendencia, para nuestra Dirección de Promoción Social, Secretaría de la Juventud y Faroles, fue importante lograr unirnos en un hilo conductor en los distintos ejes y las distintas temáticas que interesan a la comunidad desde el carnaval. Desde el Farol Velódromo volvió a resurgir lo que es la comparsa Velosamba con un trabajo muy importante por parte de Serrana Colman que fue quien la armó y fue la coordinadora”, dijo Caballero.
Respecto al desfile, precisó sentir “mucha satisfacción porque eso se logró, tuvimos desde niños, jóvenes y personas muy mayores que participaron, algunas de las que nos manifestaron su alegría porque nunca habían logrado ser parte de un carnaval y con esta comparsa lo lograron y eso para nosotros es un premio muy importante y consideramos que fue un objetivo logrado”.
SEGUIR TRABAJANDO
Por otra parte, Serrana Colman explicó que el compromiso se vio por parte de todos los integrantes que dijeron “volvemos”.
“Quien dio el puntapié inicial fue el intendente, que nos pidió que volviera Velosamba. Es nuestro undécimo desfile pero este fue muy especial, porque se trabajó mucho desde lo social y la inclusión. La escuela de samba es un lugar donde tratamos de que no tengan dificultades, sino que vayan a bailar, a tocar, a disfrutar, nada de decir no puedo… Siempre les digo que vayan a los ensayos y vean lo que es todo”, comentó.
Para el desfile “se trabajó muchísimo por parte de toda la gente, estuvieron todos comprometidos y poniendo su granito de arena y con gente de todas las edades hasta adultos mayores. Se trabajó en el armado de las dos carrozas con gente de la Intendencia y es importante destacar que no hubo gastos porque se usaron cosas que estaban, se recicló y se pudieron armar cantidad de cosas. Trabajamos los faroles de todos los barrios, Arana, Chaplin, Suroeste, Nuevo Paysandú, Barrio Norte, Curupí y La Chapita y también vino gente del interior de Quebracho y de la Karioka de Guichón. Pudimos enrabar todo, trabajar juntos y desfilar con un grupo de unas 240 personas y que incluso faltó gente, por lo que para nosotros fue todo un éxito. Estábamos con mucho miedo e inquietudes de ver como iba a salir, pero nos fue estupendo, y lo que recibimos de la gente fue lo mejor”, dijo Colman.
Asimismo, adelantó que seguirán apostando al aprendizaje “en el Farol Velódromo con diferentes talleres para que el carnaval 2024 sea mejor”.