Escribe Danilo Arbilla: Un solo corazón

Lawfare, cada vez más en la picota. Se sabe si –y es seguro–, que no se han registrado casos de “lawfare” en Rusia, China, Nicaragua, Venezuela, Cuba, Bolivia y El Salvador. Pero en occidente, en el liberal, demócrata y cristiano es distinto. El capitalismo lo ha hecho bosta y hay mucho “lawfare”.
¿Se trata de que “hay jueces chantapufis”?
Eso mejor lo responde el papa Francisco al final.

Para esclarecer un poco veamos lo que se dice por estos días al respecto. Todo en relación a las imputaciones, juicios, condenas, denuncias y acusaciones a Cristina Fernández de Kirchner por Argentina y Ronald Trump por EE. UU. Dichos y declaraciones pertenecen a ellos mismos o a muy allegados a ellos. Confieso que se me han entreverado un poco, pero igual como que hay un hilo conductor. Por eso lo del título.

Ahí van: “Una caza de brujas”, “utilizan la Justicia como arma para castigar a un oponente político”, “me quieren condenar” (dos veces), “la quieren proscribir”, “lo quieren proscribir”, “instrumentalización de la justicia en Estados Unidos con fines políticos”, “son las marionetas de Magneto”, “las élites políticas y quienes manejan el poder han instrumentalizado el gobierno para intentar detenerlo/la. Van a fallar y será reelegido/a de la manera más arrolladora…”, “el abogado de la vicepresidenta, reclama que jueces imparciales integren la Cámara de Casación”, “un delirante…”, “mequetrefe”, “marginales políticos hay en todos lados, también en los Estados Unidos”, “hoy el presidente es la nada política”, “ha elaborado esquema de sobornos y comisiones ilícitas que defraudó al pueblo en miles de millones de pesos”, “tiene varias denuncias y juicios por delitos económicos, políticos y sexuales”, “es una política profundamente corrupta que ha socavado el estado de derecho y sus instituciones políticas”, “para que nadie tenga dudas, desde el norte le llegan refuerzos al Partido Judicial”, “Estados Unidos es ahora un país del Tercer Mundo, una nación en grave declive”, “es un complot de la derecha, de los que están al servicio del imperialismo yanqui”, “se va a volver masivamente contra Joe Biden”, “es el tipo de mierda del nivel de un comunista. Esto haría sonrojar a Mao, a Stalin o a Pol Pot”, “para que nadie tenga dudas”. “¿En serio lo van a seguir negando? Dale”.

Cristina y Ronald caminan por senderos muy parecidos. Ambos tienen muy buena opinión de sí mismos. Cuando perdieron no fueron al cambio de mando. Tienen sus propias “barras bravas”. Son los blancos preferidos del “lawfare”.
Y Brasil. Acaba de pisar tierra Bolsonaro y ya tiene como cinco juicios. “Qué quilombo se va a armar”. Dicen que los militares dispondrán que el mismo “lawfare” que se aplico a Lula, se le aplique a Bolsonaro. Que lo metan preso para bajarle un poco los humos, pero con vistas a que sea el próximo presidente.
Ya no sé para qué lado tengo que patear.

Ni el Papa ayuda. Dijo que “hay jueces chantapufis”, para definir el lawfare y defender a Cristina y Lula, no a Trump o Bolsonaro. En eso Francisco ha sido equilibrado, bendice a Cuba y condena al liberalismo, defiende pederastas pero cambia si hay mucho grito, le consiguió a Maduro el plazo que necesitaba para “transformar” a Venezuela y recién ahora condenó a Ortega. Bendice a Hebe y violentos argentinos propios. Hace cosas malas y las hace bien, pienso. No soy creyente; si me equivoco seguramente no iré al cielo. Si es como lo pintan, Francisco tampoco, supongo.