El lunes 15 de mayo comenzó el Plan Invierno, con dispositivos de atención del Ministerio de Desarrollo Social a nivel nacional. El refugio en Paysandú se encuentra en un espacio dispuesto en la capilla Santa Elena, ubicada en Bruno Goyeneche y Ayacucho, donde hay un cupo de 60 camas disponible de 19 a 9, con la excepción de los días de alerta –establecidos por el Instituto Uruguayo de Meteorología (Inumet)– que abre sus puertas durante las 24 horas. “Seguimos con el equipo multidisciplinario del período anterior y realizamos ajustes. Si bien a esta altura del año, el año anterior ya habían bajado las temperaturas, aún no se completan los cupos. Pero a la población le decimos que puede llamar al 911 para comunicar sobre personas en situación de calle”, dijo el director adjunto del Mides, Alejandro Colacce.
“Antes teníamos cupos de 33 camas y ahora se elevaron a 60. Además de otros diez cupos en el batallón y unas siete personas que tenemos en pensiones, a quienes se brinda seguimiento para que tengan una salida laboral”, dijo a EL TELEGRAFO.
En la primera semana no se completaron los cupos disponibles en el refugio. “El lunes asistieron unas 35 personas, el martes fueron 37, el miércoles unas 43. Ese ha sido el promedio hasta el momento, pero no se da a ninguna persona por perdida”.
Colacce destacó “la coordinación con la Intendencia y la directora de Promoción Social, Guadalupe Caballero, con respecto a la comida que se entrega en el refugio que viene del comedor municipal y el aporte de los funcionarios, con una carga de humanidad que va más allá del esfuerzo que deberían hacer”.
En las recorridas “se evalúan las situaciones con los equipos multidisciplinarios junto a la Policía Comunitaria, pero aclaramos que no es una internación compulsiva. No podemos obligar a quienes no quieren ir al refugio, sino que lo hacemos cuando la vida de una persona corre peligro”.
Colacce informó que “hemos recibido muchas denuncias que se investigan con las duplas en el territorio. Porque no todas las personas que están en la calle, se encuentran en situación de calle. En muchos casos, tienen familia y en otros, hay problemas con las tutorías porque se trata de personas con patologías siquiátricas. Si son familias con niños a cargo, en forma inmediata se deriva al INAU. Es decir, hay que dejar en claro qué es una situación de calle y qué no lo es”.
Donaciones de aduanas
En los procedimientos de rutina efectuados por los funcionarios de Aduanas, se realizan incautaciones diarias de alimentos, productos de higiene personal y limpieza que “recibimos en donaciones para el Mides”.
Colacce agregó que “la mercadería incautada ha sido suministro del Mides. Son productos de la canasta básica, así como limpieza e higiene personal que disponemos para el Plan Invierno y llevamos adelante desde el año pasado. Ya habíamos comenzado con alguna experiencia en pandemia, pero no había tantos productos por el cierre de los puentes. Cuando comenzó a levantarse, luego de la pandemia, perdimos nuevamente la colaboración de Aduanas, tal como lo hace con otras instituciones”.
En consulta con las autoridades locales, “accedieron a entregarnos mercaderías y, en definitiva, Aduanas decide darle una finalidad que se vuelca a la comunidad”.