Los extrabajadores de PILI continúan sus trámites con asesores legales y reclaman por el cobro de los créditos laborales, ante la posibilidad de ser incluidos en el fondo creado en la órbita del BPS. En agosto ingresarán los expedientes y realizan gestiones para obtener apoyo político de los legisladores departamentales.
“Son alrededor de 200 extrabajadores porque reclaman los peones de los tambos, administrativos, mandos medios y extrabajadores de producción de PILI. La mayoría está asesorado por la doctora Violeta Saldivia y otro grupo por la doctora Silvia Cabrera. Nos reunimos con las diputadas Nancy Núñez, del Partido Nacional y Cecilia Bottino, del Frente Amplio, así como el diputado Juan Carlos Moreno, del Partido Colorado para informarles sobre el trabajo de las abogadas que hacen planillas individuales de cada extrabajador para presentarlos en el BPS”, dijo Marcel Petrib, integrante del grupo que reclama por el cobro de adeudos.
En los primeros días de agosto presentarán los trámites ante el Banco de Previsión Social, “y se necesita el apoyo político de los tres diputados por Paysandú para que agilicen los expedientes, más allá de que la última palabra es del Poder Ejecutivo”.
Petrib señaló que “en comunicación con el ministro de Trabajo, Pablo Mieres, lo puse al tanto de las reuniones con los diputados y el trabajo de las abogadas”. El otro punto de la propuesta consultada, está vinculada “a las gestiones comprometidas por Moreno ante la posibilidad de una prejubilación para los trabajadores mayores de 55 años y con más de 30 años de aportes en la empresa porque no hay alternativas para estas personas que tienen grandes dificultades de inserción laboral. Moreno nos pidió que le traslademos el planteo a Mieres y eso hicimos, pero nos aclaró que puede generarse un antecedente para otras similares. Nosotros instamos a la búsqueda de una alternativa porque sabemos que, además de los extrabajadores de PILI, hay miles de trabajadores que se encuentran en la misma situación en el país”.
Cosepi
La cooperativa de trabajo conformada por extrabajadores de la industria láctea atraviesa por una situación compleja ante la liquidación y venta de los bienes que pertenecieron a PILI. “La realidad de la cooperativa no escapa a lo que ocurre en el departamento desde el punto de vista laboral. Actualmente nos encontramos brindándole servicios a Azucitrus y hay cinco integrantes de la cooperativa en la custodia de ambas plantas de 22 a 6 horas”, explicó a EL TELEGRAFO Alejandro Ayende, presidente de Cosepi.
Por otro lado, Cosepi fue convocada nuevamente por los planteles femeninos de Litoral y Progreso para tareas de vigilancia, “y si bien siempre buscamos alternativas, tenemos un presente muy complejo. Somos 19 integrantes en total, así que el resto de los trabajadores estamos en el seguro de desempleo”.
La explanta quesera “está vacía y con la empresa Jugos del Uruguay no tenemos ningún vínculo. Tenemos conocimiento que no llegaron a un acuerdo con el Banco República por el inmueble de la planta de suero. En realidad, de PILI sólo quedan pendientes el inmueble de la planta de suero, la planta de tratamiento de efluentes y un terreno por calle Setembrino Pereda. Son los únicos tres bienes de todo lo que era PILI. El inmueble de la planta quesera fue adquirido por Sanducitrus y realizamos la custodia por acuerdo con el BROU. Cuando finalicen los trámites administrativos y pase a manos de la nueva propietaria, nos presentaremos como cooperativa para ver la posibilidad de continuar trabajando”, concluyó.