Una veintena de personas se concentró en la víspera pidiendo justicia ante el atroz asesinato de Giuliana Lara y su pequeño hijo Mateo, cuyo responsable se encuentra privado de libertad a la espera del juicio.
Con un poco de desánimo, los organizadores señalaron su desazón ante la escasa convocatoria, “porque necesitamos que Giuliana y Mateo no sean olvidados” dijeron a EL TELEGRAFO.
La movilización se debió a la prórroga de la detención preventiva de Jorge Daniel Lara Ríos, hermano y tío de las víctimas, quien por ahora es el único señalado como autor del hecho.
